Madrid, 30 jun (RHC) El presidente del Gobierno en funciones Mariano Rajoy iniciará negociaciones con otros líderes políticos para intentar llegar a un acuerdo que permita la formación de un nuevo ejecutivo en España, tras las elecciones del domingo pasado.

Rajoy informó de esa intención durante una rueda de prensa ofrecida la víspera en Bruselas, luego de asistir a una reunión del Consejo Europeo para analizar el impacto de la salida de Reino Unido de la Unión Europea, indica Prensa Latina.

El también líder del conservador Partido Popular (PP) se pronunció por la conformación de un gobierno a la mayor celeridad posible, que cuente con una amplia base parlamentaria.

En los comicios del 26 de junio -una repetición de los realizados el 20 de diciembre ante su inconcluso desenlace-, el PP volvió a ser la fuerza más votada con el 33,03 por ciento de los sufragios y 137 escaños en el Congreso de los Diputados.

Pese a mejorar sus resultados de hace seis meses, cuando conquistó 123 bancas, la derecha encarnada por Rajoy deberá ahora buscar los apoyos necesarios para gobernar, al quedarse por debajo de la mayoría parlamentaria, fijada en 176 de los 350 miembros de la Cámara baja.

Adelantó que en esta primera fase de contactos espera conocer la posición del resto de las fuerzas políticas de cara a alcanzar un entendimiento y, a partir de ahí, si ve una "buena disposición" el PP designará una comisión negociadora.

De acuerdo con el sistema parlamentario español, una vez celebradas las elecciones corresponde al Congreso de los Diputados elegir al presidente del Gobierno, que para ser investido necesita mayoría absoluta en una primera vuelta, es decir 176 votos.

En caso de no conseguirlos, 48 horas después se procede a una segunda votación y entonces el requisito es lograr mayoría simple (más votos a favor que en contra).

Para asegurarse otros cuatro años en el Palacio de la Moncloa (sede gubernamental), el presidente del PP necesitaría que otros líderes acepten abstenerse en las mociones de confianza para permitir un gobierno de minoría.

"Lo más importante en este momento es tener la voluntad de llegar a un tipo de entendimiento para dar salida a esta situación, luego ya veremos en qué se concreta esa voluntad", comentó.

Rajoy manifestó su deseo de contar con el apoyo de los 85 diputados del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) para constituir una administración estable de amplia mayoría.

Sin embargo, el PSOE avanzó que no apoyará ni se abstendrá en una eventual votación de investidura con Rajoy como candidato.

La otra opción que dijo estar barajando es la de un ejecutivo con el respaldo de las 32 bancas del centroderechista Ciudadanos, que se ubicó como cuarta fuerza parlamentaria detrás de la coalición de izquierda Unidos Podemos.

Para ello, necesitaría contar, además, con los cinco escaños del Partido Nacionalista Vasco y el asiento obtenido por Coalición Canaria.

Aun así, se quedaría en 175 diputados, uno menos que la mayoría absoluta.