Manuel Marrero reunión de la Aduana
La Habana, 17 feb (RHC) El primer ministro de Cuba, Manuel Marrero, exhortó a los trabajadores de la Aduana General de la República (AGR) a alcanzar mayor calidad y profesionalidad en la labor del cuidado de las fronteras del país, durante encuentro realizado este martes en Palacio de la Revolución entre la dirección del país y representantes de ese órgano responsable en cuidar la integridad nacional.
En la reunión se hizo una valoración de lo realizado durante el 2020, y se abordó las prioridades de la AGR para el 2021.
El jefe de Gobierno expresó que las principales prioridades del país caribeño deben estar en consonancia con las trazadas por cada organismo, y que en estas debe ser esencial la estrategia de labor político-ideológica en defensa de la identidad y la soberanía del pueblo cubano, con el objetivo de enfrentar la intención enemiga de colonizarnos y de imponernos un sistema totalmente ajeno.
Marrero, denunció la pretensión de un sector reaccionario y proimperial que trata «de satanizar todo lo que hacemos»; trata de incidir en determinados sectores de la sociedad cubana, busca dividirnos y debilitar nuestro sistema social y los logros de la Revolución.
Ante esa guerra que busca aprovechar nuestras debilidades, dijo, es importante revisar y perfeccionar un sistema de trabajo que nos permita «contar con una estrategia fuerte; y de eso no está exenta, por supuesto, la Aduana que, además, está en la primera línea de combate».
A los trabajadores de la AGR el Primer Ministro les comentó sobre los nuevos desafíos que ha traído consigo la etapa de la COVID-19, y sobre cómo hay que extraer experiencias de esa etapa. «Este tipo de enfermedad no deja espacio al error, no deja espacio a la equivocación», enfatizó Marrero Cruz, quien alertó que por estos días la «verdadera causa que nos ha dificultado enfrentar este nuevo rebrote ha sido la indisciplina, el no cumplimiento de lo que está establecido».
Otras ideas sobre la pandemia compartió el Jefe de Gobierno en la reunión: que todos nos preparemos, pues existe la necesidad de que el país vuelva a la normalidad; y la certeza de que este será un combate del cual, con toda seguridad, saldremos victoriosos.
Sobre la Tarea Ordenamiento, señaló que ha sido «un proceso muy profundo y complejo», sustentado en años de estudio y con un indudable impacto en la economía y la dimensión social, pero que tampoco está exento de errores, de dificultades, y al que se le está dando seguimiento, a propósito del cual están siendo pulsadas las diversas opiniones de la población.
A los representantes de la Aduana, el Primer Ministro dijo que han demostrado cuánto se puede hacer, y que constituyen ejemplo de la política cubana de tolerancia cero ante las drogas y otras sustancias dañinas.
«Es importante, resaltó, que esa misión que ustedes desempeñan de manera profesional y de manera disciplinada (…) vaya acompañada de la otra parte de la profesionalidad que demanda la atención directa al público».
«A ustedes les toca una tarea dura —recordó—, que es hacer cumplir lo que está establecido y decir que no cuando la gente a veces no entiende por qué es no».
«Una cuestión en la que hay que seguir insistiendo —comentó Marrero Cruz— es que esa defensa de la frontera, ese trabajo profesional de ustedes garantizando la seguridad nacional, tiene que ir acompañado de un buen trato, de una atención agradable a todo tipo de persona, de persuadir, de explicar, con buena forma, qué es lo que está establecido; y si es alguien que está violando lo que está establecido, explicarle bien qué es lo que se violó, por qué tiene que aplicarse una medida».
Igualmente hizo énfasis en perfeccionar los métodos, en simplificar todo lo que pueda ser simplificado, en no prohibir por prohibir, sino en regular lo estrictamente necesario. Hizo alusión, además, a la importancia de seleccionar y preparar a quienes trabajarán representando al país, así como a ofrecer todas las oportunidades posibles a los más jóvenes.
El análisis tuvo como punto de partida el informe ofrecido por el jefe de la Aduana General de la República, Nelson Cordovés Reyes, quien comentó que la etapa precedente estuvo marcada por el cuidado de las normas sanitarias, por el uso de la ciencia, la tecnología y la innovación, por la superación teórica de los trabajadores en gran parte muy jóvenes, así como por el cuidado de los compromisos con la Organización Mundial de la Aduana.
Entre los principios defendidos en su labor cotidiana por este órgano de control y fiscalización, según expuso Cordovés Reyes, está el cuidado de los valores más genuinos de la nación, así como la filosofía de pensar como país.
Varias voces se sumaron al análisis, y de conjunto abogaron por la preparación profesional de los trabajadores, por la informatización de la entidad, por hacer alianzas con centros de altos estudios, por defender la ciberseguridad, y ascender en la excelencia a la hora de tratar con los ciudadanos.
Que todo pasa por el desempeño de los seres humanos, que hay que participar activamente en los procesos de dirección de la entidad, y que en el trabajo político-ideológico y la defensa de los valores éticos y morales descansa gran parte del éxito, fueron otras de las reflexiones escuchadas en el encuentro dedicado al desempeño de una estructura clave en la defensa de la Isla.