Foto: Leonel Batista González
Por: Yaqueline De la Rosa Hermida
La Habana, 6 may (RHC) A pocos metros del ilegal enclave estadounidense impuesto en el municipio guantanamero de Caimanera, los delegados del VIII Seminario Internacional por la Paz y la Abolición de las Bases Militares Extranjeras ratificaron que constituye un desafío la lucha por la soberanía de los pueblos, reto por el equilibrio de la vida misma.
Con la participación de líderes del Consejo Mundial de la Paz, Fernando González, Héroe de la República y presidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos, además de las máximas autoridades de la provincia, se leyó la declaración final de la cita que reunió a 80 participantes de 30 países, incluidos algunos en modo virtual.
Sara Román Palmezano, miembro del Comité de Amigos de Cali, en Colombia, en nombre de sus compañeros expresó el apoyo a Cuba en la lucha por la devolución del territorio ocupado en la Bahía de Guantánamo por la base impuesta en contra de la voluntad del pueblo y gobierno cubanos.
Asimismo, refirió que los representantes de organizaciones pacificistas y de solidaridad denunciaron el uso de la controversia de la Guyana Esequiba para promover la presencia del comando sur que lacera la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz y remarcaron su vigencia ante las amenazas que se ciernen sobre la estabilidad de la región.
Foto: Leonel Batista González
También se pronunciaron por el derecho del pueblo haitiano a encontrar una solución pacífica a sus problemas internos y rechazaron cualquier tipo de intervención en ese país, así como apoyaron la voluntad de los venezolanos de realizar sus próximas elecciones en un ambiente de paz. ´
Durante el acto efectuado en el parque de Caimanera, la alumna Lauren Cuza Ruano, de la escuela Luis Ramírez López, en nombre de los niños del territorio, expresó que aunque vive muy cerca de la base estadounidense, se siente protegida por quienes custodian el área limítrofe con ese enclave, a diferencia de los niños de Palestina, hoy afectados por el impacto de los ataques sionistas contra su nación.
Por eso, instó a los luchadores por la paz a continuar sus acciones para el fin de este y otros conflictos armados en el planeta que amenazan a toda la humanidad.
Luego de la declaración final de la cita, los delegados confraternizaron con los pobladores de Caimanera y conocieron de su vida socioeconómica, manifestaciones artísticas y deportivas.
Concluyó en la provincia cubana más oriental el octavo Seminario Internacional por la Paz y la Abolición de Bases Militares Extranjeras con el llamado a fortalecer las acciones pacifistas para enfrentar la escalada del injerencismo de todo tipo y los conflictos en el orbe.
