Fotos: Prensa Latina.
La Habana, 31 ene (RHC) El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, abogó este viernes por un nuevo orden internacional basado en la solidaridad, cooperación y el respeto al derecho de cada país a exponer su sistema político, económico y social, sin injerencias.
Al clausurar la VI Conferencia Internacional Por el Equilibrio del Mundo, el mandatario recalcó, que debe ser un modelo democrático, en el que todas las naciones tengan la oportunidad de estar realmente representadas en igualdad de condiciones.
Los desafíos para lograrlo o incluso acercamos a él son inmensos, aclaró Díaz-Canel, a la vez que aseguró que se requiere de unidad, estrategia y una visión clara en este objetivo.
El jefe de Estado explicó que un nuevo orden «debe ser un modelo sostenible, que promueva la paz, la seguridad de todos, la justicia social, la prosperidad equitativa, el respeto a la pluralidad cultural, étnica y religiosa, así como que promueva el acceso la ciencia y la tecnología y los derechos humanos para todos».
Advirtió que las oligarquías dominan el mundo en la actualidad, no solo por una riqueza, sino que concentran poder político, cultural y social que intentan perpetuar un beneficio que favorece a unos pocos a expensas de muchos.
Asimismo, señaló que las grandes corporaciones industriales, los conglomerados financieros y los gigantes tecnológicos tienen el poder de tomar decisiones que afectan la vida de millones de personas, desde el acceso a medicamentos hasta la privacidad de datos.
«Estas élites no solo buscan maximizar su ganancia, sino también consolidar su hegemonía, incluyendo estándares y normas que perpetúan la dependencia», alertó. El presidente consideró que esta es la esencia del dinamismo internacional actual y explica la realidad inaceptable «de que la brecha entre los países desarrollados y subdesarrollados tiende a ensancharse sin perspectivas de que cambien».
Hizo además hincapié en que las naciones en desarrollo, en especial sus pueblos, «tienen el derecho a formar un mundo de mejores posibles y tienen el derecho y el deber a luchar por ello».
Eso no será posible, dijo, si no se avanza significativamente a favor de un modelo internacional distinto al actual. (Fuente: Prensa Latina).