La Habana, 18 ene (RHC) En un escenario para mostrar los resultados en el seguimiento de estos pacientes de riesgo, desde las terapias intensivas neonatales y pediátricas hasta las investigaciones realizadas en este sentido desde distintas partes del país se convertirá el XXVIII Congreso Cubano de Pediatría, al cual asistirán unos 400 delegados entre cubanos y extranjeros de ocho países.

La cita se desarrollará junto al VII Simposio Internacional de Terapia Intensiva Neonatal y Pediátrica y el II Simposio Internacional de Puericultura, del 23 al 26 de este mes en el Palacio de Convenciones de La Habana, y cuenta con un ambicioso programa, que acoge temas vinculados a la prevención, promoción de salud e intensivismo, en el rescate del niño críticamente enfermo, y expondrá los logros que al respecto exhibe Cuba en puericultura y terapia intensiva neonatal y pediátrica.

En su 90 aniversario, la Sociedad Cubana de Pediatría celebra su XXVIII Congreso Nacional dedicado a los aspectos preventivos, a la atención del niño sano y a los problemas que están afectando la salud de los niños y adolescentes.

El doctor en Ciencias Fernando Domínguez Dieppa, especialista en II grado en neonatología y pediatría afirmó: «Si por un lado tenemos el reto constante de mantener y continuar disminuyendo indicadores como la mortalidad infantil, que hace pocos días celebrábamos era la más baja de la historia, tenemos los pediatras y otros especialistas afines hoy un desafío mayor y ligado al anterior, el de garantizar la calidad desde el inicio de la vida».

Podrán conocerse, explicó el especialista, cómo se desarrolla la prevención de la retinopatía de la prematuridad, así como el pesquisaje de las enfermedades metabólicas y de los trastornos de la audición, aspecto último que se generalizará a todo el país desde el momento del nacimiento.

De igual modo, detalles de cómo funcionan las redescardiopediátrica, nefrológica- pediátrica y la red para la detección de niños con enfermedades malignas (unos 200 cada año) a lo largo y ancho del país, la intervención oportuna y el diagnóstico, tendrán lugar en los debates.

La doctora en Ciencias Gladys Abreu Suárez, especialista de II grado en pediatría y presidenta del comité organizador, agregó que el programa científico incluye actividades como un simposio de infectologíaliderado por el Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí, y donde se tratará todo lo relacionado con las arbovirosis y su manejo en los niños y el protocolo de seguimiento a los hijos de madres que tuvieron Zika.

Apuntó la profesora titular, Pediatría 2018 incluye dos simposios de vacunas nuevas, con el Instituto Finlay; uno referente a una transferencia tecnológica con la India, donde este país ofrece la vacuna contra el rotavirus (diarrea del invierno o comúnmente llamado andancio) y que existe enel mundo hace tiempo, pero constituye una tecnología difícil de adquirir para nuestro país.

El otro, dijo, versará sobre la vacuna antineumocóccicacubana—la cual se encuentra en fase final de ensayo clínicopara poder comenzar la vacunación— y que protege contra la neumonía, que constituye un problema de salud, y la meningitis, que aunque menos frecuente es extremadamente grave. Sus resultados en eficacia, pruebas y ensayos clínicos, serán mostrados, así como lafortalezade contar con este producto que se sumaría a las 13 vacunas incorporadas al esquema de inmunización.

Las ventajas del Surfacenen el manejo del niño, no ya del recién nacido prematuro que se hace desde 1990, sino en la atención del niño con síndrome de dificultad respiratoria aguda, también se presentará en coordinación con el Centro Nacional de Ensayos Clínicos, pediatras e intensivistas, ampliaron los expertos.

Pediatría 2018 será además el espacio para reconocer no solo lomejor de nuestras investigaciones en el campo de la salud infantil en sus diferentes grupos de edades, sino para otorgar los premios Aballí, en honor al doctor Ángel Arturo Aballí Arellano, padre de la especialidad en Cuba, y en los cuales se reconocen a los pediatras que además de ejercer la asistencia y enseñanza se vinculan a la investigación.

También se reconocerá a una pediatra mujer, con el premio Liane Borbolla Vacheren homenaje a la primera presidenta, doctora en ciencias médicas en Cuba, mujer, y profesora titular en esta especialidad.

El evento está dedicado a dos miembros de honor de la Sociedad cubana de Pediatría: Santiago Valdés Martín, profesor principal de la especialidad en la Universidad de Ciencias Médicas de La Habana, padre de la nefrología pediátrica, y al profesor José González Valdés, profesor consultante y de mérito, neumólogo, quienes ya han arribado a la novena década de vida y aún están activos en la docencia, asistencia y la investigación.

No faltará tampoco el recuerdo para el Apóstol en el 165 aniversario de su natalicio, porque a «los que saben querer» entregan nuestros profesionales de la salud cada día toda su dedicación. Tampoco faltará Fidel, porque «nada es más importante que un niño» y eso es algo que Pediatría 2018 defiende.