Por: Roberto Morejón

Las autoridades de Angola reafirmaron a Cuba su gratitud por la ayuda otorgada desde la independencia en la formación de personal competente, necesario para desarrollar un país víctima del colonialismo y luego de la agresión sudafricana.

En la lucha por repeler el ataque de la entonces Pretoria del apartheid, la nación de habla portuguesa contó con los internacionalistas cubanos, un gesto congratulado por diversas generaciones de angolanos.

De esa especial amistad habló durante estos días en La Habana el presidente de ese Estado de África, Yoaun Laurencio, otrora combatiente por la liberación de su país, ex ministro de defensa, dirigente político y más tarde designado Jefe de Estado.

El primer mandatario de Angola, quien recibió la Orden José Martí, la más alta condecoración de Cuba, destacó durante su visita oficial lo que calificó de ayuda desinteresada de la mayor de las Antillas a su país y a otros del mundo a pesar del bloqueo de Estados Unidos.

Laurencio transmitió el sentir de sus compatriotas por lo que reconoce como espíritu de altruismo y solidaridad de los cubanos, al enviar profesionales de la salud y maestros.

La nación antillana está igualmente presente en Angola en una esfera tan necesaria como la construcción, dado su imperativo de dejar atrás la pobreza y acometer inversiones hacia el progreso.

En Angola prestan servicios más de 800 trabajadores cubanos de la salud y un número superior a mil educadores y constructores, mientras en el archipiélago caribeño se adiestran dos mil 180 estudiantes del extenso país.

Ese aprendizaje -encomió Laurencio- facilitó la formación para Angola de "decenas de miles de empleados en las áreas de salud, educación, agricultura, pesca, transporte, geología y minas, medios de comunicación, cultura y deportes ".

Sin embargo, los dos países no se detienen en lo logrado y hacen planes para el futuro, como lo permitieron las entrevistas aquí del estadista de Angola.

De acuerdo con Jornal de Angola, el principal diario de ese país, la visita de Laurencio a La Habana marca una nueva era en las relaciones bilaterales.

La publicación subrayó que Angola necesita aprender mucho de Cuba por su avance en ciencia, técnica y en el estudio de las enfermedades tropicales, un asunto de interés para la nación rica en petróleo.

Igualmente para Angola sería útil la asistencia cubana en los esfuerzos por aplicar la Política Nacional para el Desarrollo de los Recursos Humanos.

De manera que está previsto el aumento de la colaboración entre estos dos países con vínculos históricos forjados en la lucha por la independencia y defensa de la soberanía de la patria de Agostinho Neto.