Bogotá, 13 ene (RHC) Iván Cepeda, copresidente de la Comisión de Paz del Senado señalo que en los días transcurridos del año 2020 fueron asesinados en Colombia 17 líderes sociales.
Así se pronunció a través de su cuenta en Twitter, en momentos en que se registran frecuentes hechos de violencia en el país.
En tal sentido, señaló además el crimen –perpetrado el 1 de enero último- contra Benjamín Banguera, firmante del Acuerdo de Paz de 2016 entre el Estado y la exguerrilla Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Uno de los hechos violentos más recientes fue denunciado por la Asociación Campesina del Catatumbo.
Se trata del asesinato del líder social, Tulio Sandoval, quien formaba parte del programa de sustitución de cultivos de uso ilícito.
Según la Asociación, hombres armados llegaron hasta su vivienda, lo sacaron de la misma y frente a sus seres queridos le dispararon en varias ocasiones.
Bajo tales condiciones, el procurador General de la Nación, Fernando Carrillo, llamó recientemente a detener lo que denominó sistemático asesinato de líderes sociales.
“Como Ministerio Público le pedimos al Gobierno convocar a la Comisión Nacional de Garantías de Seguridad de manera inmediata y que se asegure su funcionamiento, pues la amenaza es latente y hay que contenerla”, expresó.
Prácticamente cada día, la violencia es una constante en la realidad colombiana pues se suceden amenazas, atentados, secuestros y asesinatos.
Todo ello sucede a más de tres años de la firma del Acuerdo de Paz y a 17 meses de la llegada a la Casa de Nariño (sede la Presidencia) de Iván Duque.
Diferentes voces coinciden en que cientos de líderes sociales, indígenas y exguerrilleros han sido asesinados desde la firma del Acuerdo, al tiempo que aumentan los llamados a su implementación integral en aras de concretar una paz con justicia social, estable y duradera.
El crimen más reciente fue cometido en las últimas horas contra el presidente de la Asociación de Trabajadores Campesinos, John Fredy Álvarez, ultimado en el departamento de Huila.
“La víctima se encontraba en la sala de su vivienda, hasta donde ingresa a una persona y, sin mediar palabra, dispara con arma de fuego en diferentes partes del cuerpo. Debido a la gravedad de las heridas, pierde la vida en el lugar”, informó el coronel Juan Carlos Restrepo Moscoso, comandante de la Policía de Huila.
En los últimos días también perdió la vida en ese departamento la líder social Mireya Hernández, atacada por desconocidos cuando llegaba en motocicleta a su vivienda en compañía de su esposo.
Bajo tales condiciones, el procurador general de la nación, Fernando Carrillo, llamó recientemente a detener lo que denominó sistemático asesinato de líderes sociales.
Todo ello sucede a tres años de la firma del Acuerdo de Paz entre el Estado y la exguerrilla FARC-EP y a 17 meses de la llegada a la Casa de Nariño (sede de la Presidencia) de Iván Duque.
Diferentes voces coinciden en que cientos de líderes sociales, indígenas y exguerrilleros han sido asesinados desde la firma del Acuerdo, al tiempo que aumentan los llamados a su implementación integral en aras de concretar una paz con justicia social, estable y duradera.
