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Madrid, 5 may (RHC) Los rifirrafes políticos planearon sobre la visita a España del presidente de Colombia, Gustavo Petro, con un balance de todas formas muy positivo.

Sus contactos y relaciones cordiales con el rey de España, Felipe VI, con el jefe del Gobierno, Pedro Sánchez, y otras autoridades como la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, consolidaron unos lazos de halagüeñas perspectivas.

Entre sus numerosas actividades destacaron la participación en la VI Feria de Emprendedores colombianos afincados en España, la apertura del Centro Cultural Gabriel García Márquez, diversas condecoraciones y varios discursos centrados en temas como la paz, el cambio climático y la violencia.

Ante sus palabras en el Congreso de Diputados y Vox, surgió la primera polémica, con el desplante del líder del extremista partido Vox, Santiago Abascal, quien se retiró del Hemiciclo y luego lanzó dardos contra el dignatario visitante.

Abascal no sólo recibió la respuesta vertical y con altura de Petro, sino que además fue criticado por la derechista presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, en el sentido del deber de respetar los protocolos y la voluntad del pueblo colombiano, que eligió al actual gobernante del país cafetero.

Incluso, aun en las diferencias ideológicas, el propio presidente del conservador Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo, se mantuvo en el Senado escuchando a Petro, identificado plenamente con la izquierda.

Además, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, hizo entrega simbólica de las llaves de la capital española, en otra muestra de civismo tomando en cuenta que el edil es integrante del PP.

El encuentro de Petro y Sánchez en el Palacio de la Moncloa fue calificado por el anfitrión con punto favorable para consolidar una relación “histórica, fructífera y larga».

Se firmaron diversos acuerdos y memorandos de entendimiento en áreas muy diversas, como la educación, la lucha contra la delincuencia y la seguridad, el deporte, la cooperación sociolaboral, el transporte y las infraestructuras ferroviarias y la conectividad.

Asimismo, en una Declaración Conjunta se reafirmó el compromiso de España con el proceso de paz de Colombia y en la que se pone de relieve la preocupación común por los impactos crecientes del cambio climático.

En tal sentido, España y Colombia coinciden en la urgencia de acelerar los esfuerzos globales en esta materia y reconocen la importancia de alcanzar resultados ambiciosos en la próxima Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP28) en Dubái.

De otro lado, la visita refuerza los lazos bilaterales. La inversión española en Colombia asciende a los 28 mil millones de euros y el comercio se sitúa en los tres mil millones.

Los ministros de Comercio de España y Colombia rubricaron un Protocolo Financiero para establecer un marco general de colaboración en este ámbito, con mil millones de euros a través de diferentes instrumentos que pondrá Madrid a disposición de Bogotá para la financiación de proyectos en sectores prioritarios con empresas españolas. (Fuente: Prensa Latina).