Por: Lorenzo Oquendo
La Habana, 24 sep (RHC) El Programa Mundial de Alimentos (PMA) en Cuba fortalece valores nutritivos aplicados en provincias del país especialmente a partir de la producción de frijoles.
Esas acciones posibilitaron aumentos productivos con satisfactorios rendimientos de cosecha entre agricultores que cultivan los granos establecido por la via fortificada con alto contenido de hierro y zinc que favorece a embarazadas y niños con edad prescolar.
Ese proyecto incorporado a la práctica laboral asciende a seis millones de dólares financiados por donantes de Canadá, Rusia y República Democrática de Corea vinculado con la protección social cubana.
Los países en desarrollo consumen cerca de 17 millones de toneladas de frijol, componente básico para la dieta alimentaria de millones de personas de esa región del mundo.
Este trabajo en Cuba esta relacionado con la seguridad alimentaria, reducción de importaciones e incorporado a la agenda de los objetivos para el desarrollo sostenible de la Organización de Naciones Unidas con beneficios nutritivos para países como Cuba donde también está la promoción de estos trabajos agrícolas destinados al beneficio público.