Por: María Josefina Arce
En la ciudad de Santa Ana se levanta la Ciudad de la Niñez y la Adolescencia como una muestra de la protección con que hoy cuenta en El Salvador ese sector poblacional, bajo el gobierno del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional.
Esta iniciativa, que se irá extendiendo a todo el territorio salvadoreño, busca brindar atención a niños y adolescentes de la zona occidental para propiciar su desarrollo integral a través de programas educativos, culturales, recreativos, deportivos y de formación vocacional.
De ahí que el centro cuente con talleres de textiles, electrónica, soldadura, ingeniería, industrial, automotriz y zapatería, así como con canchas de fútbol, tenis, pista de atletismo, piscina y gimnasio para deportes.
Un millón de dólares se han invertido en este proyecto, en el cual el gobierno logró aunar los esfuerzos tanto de instituciones estatales como organismos no gubernamentales, que reconocen el trabajo que a favor de los derechos de los niños y jóvenes viene realizando el gabinete que preside Salvador Sánchez Cerén.
El propio jefe de estado ha manifestado: “Nunca me cansaré de realizar esfuerzos para buscar el bienestar y la mejoría de las condiciones de vida de nuestros niños, niñas y adolescentes, porque creo en ellos, en su capacidad para hacer grande a este país.”
Este programa nació a partir de la estrategia establecida en la Ley de Protección Integral de la Niñez y Adolescencia y en el Plan Quinquenal de Desarrollo.
A partir de la llegada al poder en 2009 del Frente Farabundo Martí comenzó a cambiar EL Salvador que ha dado importantes pasos en los últimos años en materia social. Es así que en el 2012 se redujo el número de hogares en pobreza extrema, un flagelo que afectaba con especial fuerza a los niños.
Un año después la cobertura de educación primaria fue de 93 por ciento, y con el compromiso de miles de jóvenes voluntarios se trabaja por erradicar el analfabetismo.
Ahora bajo el mandato de Sánchez Cerén se ha fortalecido esa estrategia de inclusión social, que tiene como epicentro el cuidado las más jóvenes generaciones.
De ahí que el pasado año el gobierno lanzó el proyecto “Un niño, una niña, una computadora”, para acercar las tecnologías y facilitar el proceso de enseñanza-aprendizaje en las escuelas públicas.
En la actualidad en la nación centroamericana todos los estudiantes de la enseñanza pública reciben gratuitamente sus útiles escolares, uniformes, zapatos y alimentación, gracias al impulso dado a varias iniciativas.
Los múltiples programas que lleva a cabo el gobierno salvadoreño como la Ciudad de la Niñez y la Adolescencia son un notable paso en la construcción de un país más justo y equitativo.