Por: María Josefina Arce
Uno de los rasgos que más distinguió la personalidad del líder de la revolución cubana, Fidel Castro, fue su humanismo. De su preocupación por el bienestar y el progreso de los cubanos y de otros pueblos del mundo habla el nacimiento de iniciativas como la Operación Milagro.
Este programa gratuito de rehabilitación oftalmológica ha cambiado la vida de millones de latinoamericanos. Su impacto no se puede describir con palabras, sino con el hecho de que ha posibilitado que las personas beneficiadas tengan una mejor calidad de vida y puedan incorporarse a la sociedad.
Operación Milagro es una idea del líder de la Revolución Cubana, Fidel Castro, y del también fallecido presidente venezolano, Hugo Chávez, iniciada en 2004 con el objetivo de operar a seis millones de latinoamericanos y caribeños en un plazo de 10 años.
A lo largo de doce años se han efectuado operaciones oculares gratuitas y la entrega de lentes correctivos a personas que jamás lo soñaron, pues sus escasos recursos económicos no les permitían acceder a los costos de este tipo de intervención quirúrgica.
Este programa ha rebasado las fronteras de Cuba y Venezuela y en la actualidad favorece también a ciudadanos de otras regiones como Europa y África. Cerca de cuatro millones de operaciones se han realizado hasta el momento, al tiempo que se han entregado más de 35 millones de lentes correctivos.
En Cuba, donde hace una década existían 700 oftalmólogos, en la actualidad más de mil 700 personas se profesionalizaron en esta área, y están distribuidos en toda la red de centros de salud con servicios oftalmológicos que presta servicio a la Misión Milagro.
Esta iniciativa incluye la participación de 165 instituciones cubanas, al tiempo de que dispone de 49 centros oftalmológicos en 15 países de América Latina y el Caribe.
Este programa tiene también una vertiente educativa, pues los especialistas cubanos que participan en el no solo realizan intervenciones quirúrgicas, sino que forman a sus colegas de otros países.
Es una muestra del humanismo y solidaridad que desde su triunfo mismo le inyectó Fidel Castro a la revolución cubana, que bajo su liderazgo ha llevado salud y esperanza a numerosas regiones del mundo, sin importar distancias, ni diferencias políticas.
La Operación Milagro es un ejemplo de esta preocupación del líder histórico de la revolución cubana por los más pobres, olvidados y marginados durante décadas.
Poco más de 25 por ciento de la población mundial accede a los servicios oftalmológicos, el resto se ve afectado por las barreras socioeconómicas, barreras que este programa echó abajo.
Millones son los que hoy agradecen ese altruismo de Fidel Castro y lo llevan en su corazón para siempre como el hombre humano y generoso que siempre fue.