por María Josefina Arce

Rápida y creciente fue la solidaridad internacional con Cuba, tras el paso del huracán Mathew en octubre pasado por el oriente del país, que dejó grandes pérdidas materiales. Países como Venezuela, Ecuador y Bolivia , entre otros, hicieron llegar a los cubanos donaciones de todo tipo, a las que se sumaron las realizadas por el pueblo del archipiélago.

Ayuda que de inmediato, gracias a la eficaz coordinación y a la voluntad política del estado, llegó a las manos de los damnificados. Entre esa asistencia se encuentranslos donativos realizados por la ONU, que en reiteradas ocasiones ha resaltado no solo la inmediata acción de la defensa civil cubana para impedir la pérdida de vidas humanas ante un fenómeno meteorológico, sino la preocupación del gobierno para que no queda nadie desatendido.

En un recorrido por las zonas afectadas la Coordinadora Residente del Sistema de Naciones Unidas en Cuba, Myrta Kaulard, verificó la entrega de los donativos que comenzaron a llegar a pocos días del desastre, que dejó cuantiosas pérdidas materiales en al menos cinco municipios de la provincia de Guantánamo, en el extremo oriental cubano.

Kaulard mostró su satisfacción por la labor realizada, la cual calificó de espectacular. Enfatizó que la cadena de distribución desde los puntos de desembarque en la provincia de Santiago de Cuba hasta los municipios afectados en Guantánamo ha funcionado perfectamente, aun hacia aquellos lugares de difícil acceso y con viales montañosos muy complicados.

Al menos 10 agencias de la ONU, organizadas en los sectores de alimentación, vivienda, salud, educación y agua, enviaron donativos y más de la mitad del dinero utilizado procede del Fondo de Emergencia que tiene ese organismo internacional para casos de desastres.

Hasta el momento se recibieron ocho millones de dólares en ayuda para los afectados de las provincias de Guantánamo y Holguín, lo cual representa 30 por ciento de las necesidades contabilizadas.

Por eso afirmó la funcionaria de Naciones Unidas se trabaja para seguir recaudando fondos para la población de esos territorios.

Alimentos, colchones, potabilizadoras de agua y pastillas de cloro son algunas de los provisiones recibidas, a las que se unen 19 molinos para reciclar escombros y otros materiales e instrumentos para la construcción de viviendas.

Próximamente deben entrar materiales escolares, instrumentos y materiales para instituciones de salud y 2 mil toneladas más de alimentos, todo esto para favorecer a 662 mil personas, informó a la prensa Kaulard.

El Sistema de Naciones Unidas también prevé fortalecer proyectos ya existentes en las provincias más golpeadas dentro del Marco de Asistencia de Naciones Unidas para el Desarrollo, firmado con instituciones cubanas para el periodo 2014-2018.

Mientras avanza a ritmo satisfactorio la recuperación en esos territorios del oriente cubano, donde en breve tiempo se restablecieron los servicios de electricidad, agua potable y telecomunicaciones.

Asimismo se ha logrado recuperar más de un centenar de kilómetros de carreteras afectadas y continúa el trabajo para restablecer la comunicación vial entre los diversos puntos de Guantánamo.

La ONU ha manifestado su admiración por las estrategias adoptadas por la nación caribeña ante la amenaza de fenómenos meteorológicos, así como la inmediata respuesta del gobierno para proveer de ayuda a los damnificados y el control y organización en la entrega, para garantizar que llegue a los necesitados.