por María Josefina Arce

El accionar y pensamiento del líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro, dejó una huella imborrable en América Latina, una región que conoce tanto de la generosidad, el humanismo y la dignidad de un hombre que siempre creyó que un mundo mejor es posible.

Y en aras de esa meta batalló toda una vida, impregnada de las enseñanzas del Apóstol José Martí, quien fue su certero guía y maestro. Fidel Castro es querido en cada rincón del mundo, y en especial Latinoamérica, adonde llegó la mano solidaria y amiga de la revolución que lideró.

Intensa fue su batalla por lograr la unidad del continente y trabajar todos unidos por garantizar los más elementales derechos humanos como la salud, la educación y la alimentación a todos sus pobladores.

De su mano nacieron mecanismo como el ALBA, Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América, que ha representado un cambio en las relaciones entre las naciones, al hacer de la cooperación solidaria en pos de un desarrollo sostenible su principio básico.

En momentos en que la oligarquía latinoamericana, apoyada por la derecha internacional, ataca a los gobiernos progresistas del área como Venezuela y Nicaragua se hace necesario y urgente recurrir al pensamiento liberador y humanista de Fidel, en el que la unidad siempre ocupó un lugar esencial.

De ahí que en las últimas horas haya abierto sus puertas en la ciudad de Buenos Aires la Cátedra Fidel Castro, en la que especialistas e invitados disertarán sobre las ideas del líder histórico de la revolución cubana.

Presentada de manera oficial el pasado 10 de marzo, esta iniciativa es decisión de los Movimientos hacia el ALBA, que en su último encuentro continental celebrado en Colombia a fines de 2016 acordaron instituir la Cátedra en todos los países, aún cuando sus gobiernos no formen parte del bloque integracionista.

No solo como homenaje, sino también como un espacio para desarrollar el pensamiento crítico y estudiar el legado de Fidel nace esta cátedra en Argentina, donde también quedó instituida en la ciudad de Córdoba.

Militantes de organizaciones populares y sociales y todas aquellas personas interesadas pueden participar en esta iniciativa para conocer más profundamente el pensamiento y la obra de Fidel, quien tanto hizo por la revolución y la humanidad.

Para muchos Fidel nunca falló a quienes luchan por un mundo mejor y sus ideas servirán para encontrar los caminos necesarios a recorrer en esta coyuntura, en que las fuerzas más reaccionarias están empeñadas en que los pueblos de América Latina retornen a un pasado de pobreza, hambre y dependencia económica y política.

Fidel está entre nosostros. Su pensamiento y obra guía a los más humildes, a los que no descansan en su batallar por poner fin a las desigualdades y hacer del planeta un digno lugar para todos.