Por: Roberto Morejón

Más de cinco millones de salvadoreños deberán elegir el próximo domingo a su nuevo presidente, en un listado de candidatos donde destacan dos por sus proyecciones singulares.

El ex canciller Hugo Martínez sobresale por presentar un programa de gobierno sólido, enfocado hacia los principales problemas del país, y le asiste la experiencia de su partido.

El Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional, de El Salvador, lleva dos mandatos, durante los cuales aplicó algunos programas de impacto social y luchó contra la pobreza, la corrupción y la delincuencia juvenil.

El otro aspirante a la jefatura del Estado con marcada proyección pública es un singular joven que, apoyado en una feroz promoción en las redes sociales, afirma carecer de ideología.

Se trata de Nayib Bukele, ex alcalde de San Salvador, quien rompió con el gobernante Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional para ahora presentarse como exponente de un partido derechista.

Si bien Bukele, de 38 años, se postula por la conservadora GANA ---Gran Alianza por la Unidad Nacional---, eludió durante la campaña electoral explicar sus puntos de vista y propuestas.

Los observadores se preguntaron si su táctica de eludir a la prensa y los debates con sus oponentes era realmente un intento por ocultar la carencia de una plataforma seria para dirimir los problemas del país.

Ciertamente, El Salvador aún sufre índices de violencia palpables y miles de jóvenes emigran, a pesar de los esfuerzos del FMLN, en el gobierno, por ofrecerles alternativas.

También el más pequeño país centroamericano sufre los efectos de un mal extendido en el mundo, el de la corrupción, fenómeno aprovechado por el pintoresco Bukele para atacar a los partidos tradicionales.

Más allá de esa posición se conoce poco de las ideas del representante de GANA, pero su astucia para manejar códigos propagandísticos le aseguraron tomar delantera en las encuestas.

Sin embargo, otras voces de reputados analistas apuestan porque los salvadoreños tendrán irán a segunda vuelta en marzo. Vaticinan los comentaristas que ninguno de los cuatro candidatos obtendrá más de 50 por ciento de los votos en la ronda inicial de votación.

En esa venidera oportunidad, los salvadoreños deberán pronunciarse si apuestan por el ambiguo Bukele, el experimentado Hugo Martínez o el representante del archirreaccionario partido ARENA, Carlos Callejas, los optantes de más peso.

a quinta elección presidencial después del fin de la guerra insurgente contra los regímenes de fuerza en El Salvador, coloca sobre el tapete la disyuntiva entre una izquierda responsable de sus deberes y la derecha neoliberal, con sus diversos rostros.