Por María Josefina Arce.
La gestión del gobierno del presidente Evo Morales en más de una década ha sido valorada de altamente positiva por expertos y organismos internacionales, pues hoy Bolivia descuella económica y socialmente en América Latina.
La nación andina es la que mejores resultados económicos ha tenido. Durante los últimos años ha mantenido un crecimiento sostenido de cerca de cinco por ciento, lo que habla del acertado y cuidadoso trabajo del gobierno en ese aspecto.
Es, por demás, un ejemplo a seguir en cuánto a la reducción de la pobreza y las desigualdades. La secretaria general iberoamericana, Rebeca Grynspan, afirmó que "el modelo boliviano de redistribución de la riqueza es un modelo que todos los países estamos observando y que muchos de los expertos e investigadores han puesto de ejemplo".
De acuerdo con datos del Ministerio de Economía, la pobreza extrema disminuyó en el país de 38,2% en 2005 a 15,2% en 2018 con la redistribución de la riqueza entre la población más vulnerable.
Y es que a partir de la nacionalización de los hidrocarburos en 2006, las ganancias obtenidas se han destinado a programas de gran impacto social, que han beneficiado a sectores tradicionalmente marginados.
El alza de ingresos fiscales fue acompañada de fuertes inversiones públicas y un modelo de desarrollo productivo basado en la demanda interna
Asimismo, pesar de una situación internacional adversa, con la crisis del precio de las materias primas, Bolivia se trazó un plan de ahorro y prioridades para no afectar la estrategia económica y social.
Igualmente ha buscado diversificar la economía, con la venta de diésel, estaño y soya, para no depender de los hidrocarburos, un mercado con sus altas y bajas.
Tanto los expertos del Fondo Monetario Internacional, como analistas locales, coinciden en que la estabilidad política y social ha contribuido al crecimiento económico. Recordemos que entre 2001 y 2005 Bolivia tuvo cinco presidentes y se sucedían los conflictos sociales.
Pero el gobierno de Evo Molas se ha dado también a la tarea de formar a los más jóvenes, que en un futuro contribuirán al avance de Bolivia. Se ha logrado el acceso a la educación e incentivado la permanencia en las aulas.
El otorgamiento de becas en prestigiosas universidades del mundo es otra de de las estrategias del gobierno de Morales para firmar profesionales y técnicos mejor preparados, capaces de enfrentar los futuros retos.
La realidad es que Bolivia hoy es referente en América Latina en diversos aspectos y no solo es un receptor de cooperación, sino que ofrece colaboración en varios de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, específicamente en los temas de Hambre Cero, Salud y bienestar, y Trabajo decente, resaltó la secretaria general iberoamericana.
La Bolivia pobre e inestable ha quedado atrás. Más de diez años de mandato del presidente Evo Morales han convertido al país andino en un modelo a seguir en muchos aspectos, lo que es reconocido a nivel internacional.