Un suceso impensado en la época

Editado por Maite González Martínez
2020-05-04 07:37:59

Pinterest
Telegram
Linkedin
WhatsApp
Embajada cubana en Washington. Foto/Cubadebate.

Por: Roberto Morejón

Medios estadounidenses de prensa actuaron tan rápidamente para dar precisiones del ataque contra la embajada cubana en Washington como para tratar de mitigar la gravedad de la acción.

Calificada acertadamente de terrorista por las autoridades cubanas, la agresión cometida por un sujeto al que los medios le atribuyen supuestos antecedentes psiquiátricos, ha sido “suavizada” por los cronistas para inspirar compasión.

Sin embargo, el afán mediático resulta engañoso y  pueril.

Reviste extrema peligrosidad lanzarse a tiros contra una sede diplomática, en contraposición a lo establecido por acuerdos internacionales.

Analistas llamaron la atención acerca de la impunidad del individuo fuertemente armado, a quien presentaron como un supuesto cubano, “perturbado”, según habría dicho, por la persecución de agentes de La Habana.

La puesta en escena está dirigida a restar  trascendencia al ametrallamiento de un inmueble oficial que pudo ocasionar muertes.

Cada país está obligado a brindar el máximo sosiego posible a las representaciones extranjeras, y si se quiebra la protección, investigar, informar al afectado y sancionar a los autores.

Paradójicamente las autoridades del archipiélago caribeño denunciaron la falta de información de la parte estadounidense tan pronto ocurrieron los disparos.

La omisión contrastó con la avalancha de declaraciones, twits y comunicados de figuras del Departamento norteamericano de Estado e incluso de congresistas, empeñados en saturar a los receptores con mensajes anticubanos.

Esas diatribas envenenan la atmósfera y pueden hacer creer a los exaltados que tienen luz verde para atropellar, amparados en la facilidad de armarse en Estados Unidos.

En la narrativa de los medios estadounidenses NO hay reproches a esa oratoria inflamada y en su lugar exhiben al presunto atacante de la embajada cubana como un ciudadano afable con la familia.

De esa forma estimulan la violencia, aunque nada de ello harían si una balacera de ese tipo ----siempre condenable--- se ejecutara contra una representación de la primera potencia militar del mundo.

Funcionarios cubanos recordaron atinadamente la complicidad de administraciones estadounidenses con bandas terroristas.

Los inquilinos de la Casa Blanca han manejado el terrorismo de Estado como una de sus herramientas.

Son verdades inobjetables a la luz del reciente hecho criminal en una concurrida calle de Washington, donde se asientan sedes diplomáticas.



Comentarios


Deja un comentario
Todos los campos son requeridos
No será publicado
captcha challenge
up