Por Maria Josefina Arce
Siglos de colonización, esclavitud, de una gigantesca deuda traspasada por Francia a Haiti tras su independencia en 1804 y por la que también tuvo que pagar a la Metrópoli, más el robo al pueblo durante casi 30 años de la dictadura de Jean Claude Duvalier han convertido a la pequeña nación del Caribe en la mas pobre del hemisferio occidental.
Una condición que ha mantenido a lo largo de décadas y que se acentuó luego del devastador terremoto de 2010 que dejó unas 250 mil víctimas mortales, mientras un millón 300 mil perdieron su hogar.
El cólera llegaría meses después a un país con una infraestructura inexistente y que no tenía las condiciones necesarias para hacer frente a la epidemia. Haiti requirió una mayor ayuda médica de Cuba y de otros estados que como Brasil se volcaron también a la construcción de nuevos centros hospitalarios.
Ese es el escenario que ha encontrado la COVID 19 en Haiti, que todavía no ha logrado levantarse de los estragos causados por el fuerte sismo, de posteriores huracanes como el Matthew en 2016 y que en los últimos meses ha añadido a esa situación una inestabilidad social y política, con la ocurrencia de protestas contra el gobierno de Jovenel Moise.
De ahí que los especialistas hayan alertado sobre un posible estallido de la enfermedad causada por el nuevo coronasvirus, ante la compleja situación socioeconómica del pequeño país caribeño.
Y aunque se cerraron las fronteras y se adoptaron otras medidas, el hecho de que gran parte de la población viva por debajo de la línea de pobreza, haya un alto índice de desnutrición y el hacinamiento en que muchos viven facilita el contagio de la enfermedad por el nuevo corona virus.
Por demás recuerdan los expertos Haiti es el país del Caribe con el mayor número de casos de VIH-SIDA y presenta igualmente una alta prevalencia de tuberculosis, lo que confiere mayor vulnerabilidad a su población ante la COVID 19.
La directora general de la OPS, Organización Panamericana de la Salud, Carissa Etienne, advirtió que existe un verdadero peligro de que se produzca un brote a gran escala de la dolencia en el país.
La realidad es que Haiti no está preparado para hacer frente a esta pandemia, se ha dejado de invertir en salud y se han puesto en marcha políticas neoliberales, que han llevado a una agudización de la pobreza y la inseguridad alimentaria. La COVID 19 podría llevar a una crisis humanitaria en la primera república negra del mundo.