Por Maria Josefina Arce
La propuesta nació a finales de abril en territorio francés. La organización Cuba-Linda y el Comité Francia-Cuba pidieron que se otorgue a la Brigada médica Henry Reeve el Premio Nobel de la Paz, un reclamo que muchos califican de justo por la solidaria labor que desarrolla en cualquier parte del mundo y que destaca en tiempos de la COVID 19.
Con el paso de los días y las semanas la solicitud ha ido sumando nuevas voces, en un reconocimiento al combate a la pandemia que los médicos cubanos han librado y libran en diversos países como Italia y Andorra, donde la gratitud de sus ciudadanos habla por si sola de la dedicación y su esfuerzo por salvar vidas.
En la actualidad cerca de 200 organizaciones piden que se reconozca la actitud solidaria de Cuba, que aún en medio de su propia batalla contra la enfermedad causada por el nuevo coronavirus y el recrudecimiento del bloqueo norteamericano no olvida la esencia humanista de su revolución.
La iniciativa se ha convertido en una campaña internacional, con llamados en muchas naciones, entre ellas Argentina, Brasil, Grecía, Rumania y Estados Unidos, a pesar de los intentos del gobierno del presidente Donald Trump de desvirtuar el carácter solidario de la ayuda médica cubana y de incluso, amenazas de sanciones a aquellos que soliciten la asistencia de la Mayor de las Antillas.
En las últimas horas se sumó al pedido internacional la Asamblea Internacional de los Pueblos, integrada por representantes de más de 187 organizaciones de 87 países. Esta entidad sesiona en diferentes capitales del mundo y traza acciones de protesta en defensa de las comunidades y poblaciones explotadas por el gran capital.
La Asamblea demandó que se reconozca y valorice públicamente el trabajo heroico de los profesionales cubanos de la salud en todo el mundo, como un deber para aquellos que defienden la ayuda y la cooperación en vez del individualismo y egoísmo.
Los promotores de la iniciativa califican de hermosa y justa la campaña, ante el internacionalismo desplegado por el archipiélago y sus profesionales de la salud en los mas diversos escenarios de dolor y sufrimiento humano.
Para Rose-Marie Lou, encargada política de la asociación solidaria Cuba Linda, tan grande es la obra humanista de las brigadas médicas cubanas que este galardón tan emblemático estaría justificado y devolvería todo su sentido al Premio Nobel de la Paz.