Minrex
Por: Roberto Morejón
Con nuevos pasos dados en las últimas semanas, Cuba amplió los mecanismos encargados de alentar y allanar el camino hacia la consecución de las inversiones extranjeras.
La mayor de las Antillas cuenta ya con una sede permanente de la Ventanilla Única de la Inversión Extranjera , un canal en funciones desde enero último, aunque en sitio provisional.
Con más de un centenar de trámites a modalidades de inversión extranjeras planteadas por hombres de negocios y empresas foráneos, la referida puerta de entrada ilustra los propósitos del país de aligerar los procedimientos sin renunciar a la calidad.
El puntual acceso tiene igualmente la utilidad de actuar en aras de que cualquier entidad en el mundo pueda contactar y conocer las potencialidades de negocios en Cuba.
A favor de las propuestas también acciona la Cámara de Comercio cuando promueve rubros exportables, pues sus especialistas realizaron más de 40 videoconferencias con contrapartes de 17 países en el año en curso.
La Gaceta Oficial de la República de Cuba informó recientemente sobre decretos leyes que entrarán en vigor el 23 de noviembre venidero.
Esos preceptos posibilitarán la utilización de garantías mercantiles en el respaldo de financiamientos relacionados con las inversiones extranjeras.
Como se aprecia, Cuba organiza su plataforma de análisis, procesamiento y beneficios de las sugerencias de los hombres de negocios para trabajar aquí con sus capitales, tecnologías y canales de mercados.
Si bien la nación caribeña logró incrementar con su Ley de Inversión Extranjera la afluencia de intereses hacia este destino, los montos están por debajo de los requerimientos.
El transcurso de 2020 ha sido especialmente negativo por el impacto de la pandemia por el nuevo coronavirus.
En el caso específico de Cuba, el bloqueo de la administración estadounidense resultó tenaz en la persecución de sus transacciones financieras.
Hablamos de una tensa situación y para sortearla, avanzar y NO retroceder Cuba aprobó la Estrategia Económica y Social.
En esa coyuntura, empresarios procedentes de otras latitudes expresaron confianza en este mercado y al cabo de los estudios de rigor formalizaron proyectos en los últimos meses.
El objetivo es aumentar la participación de la inversión extranjera directa como fuente notable para el desarrollo de la economía cubana.
