Por: Roberto Morejón

En su objetivo de ampliar oportunidades de comercio, inversión e intercambios mercantiles, Cuba estrechó vínculos recientemente con importantes bloques regionales.

Los cancilleres de la ASEAN , Asociación de Naciones del Sudeste Asiático, confirmaron su aceptación a Cuba como miembro del Tratado de Amistad y Cooperación de ese conjunto de países.

Se trata de una relevante organización regional constituida por 10 naciones que globalmente representa la séptima mayor economía del mundo, con un mercado de 650 millones de consumidores.   

Entre el país caribeño y los que hacen parte de la ASEAN se concretaron hasta ahora nexos en el enfrentamiento a desastres naturales, educación, salud, calificación de recursos humanos y deportes.

El futuro es promisorio, pues es posible cooperar en ramas como la biotecnología y farmacéutica, exportación de servicios profesionales, prestación de servicios médicos y el enfrentamiento al cambio climático.

Ahora que Cuba ensaya candidatos a vacunas contra la COVID-19 , también pudiera analizarse la creación de alianzas para la manufactura de esos antígenos.

Otro campo de intereses de Cuba está actualmente en estudio para suscribir proyectos con Belarús, Kazajistán, Kirguistán y Armenia, los que junto a Rusia nuclean la Unión Económica Euroasiática.

Los países referidos respaldaron unánimemente semanas atrás la solicitud de la mayor de las Antillas de ingresar como Estado observador al bloque regional.

Después de ese paso el gobierno de la nación caribeña profundizará un examen de las potencialidades de la Unión , con vistas a un proceso de integración.

También con ese mecanismo regional puede ser factible estrechar vínculos en la salud, biotecnología y la farmacéutica, áreas donde Cuba presenta importantes logros.

De esta forma, la patria de José Martí confirma su interés de abrirse al mundo mediante diferentes modalidades económicas, incluyendo la inversión extranjera, elevada a un nivel decisivo para concretar el bienestar anhelado.

La estrategia económica y social aplicada hoy para impulsar la economía ante la crisis provocada por la pandemia y el recrudecimiento del bloqueo estadounidense prioriza áreas clave.

Entre ellas sobresalen servicios profesionales, salud, industria farmacéutica, biotecnológica y producciones biomédicas.

Todas de interés para los potenciales socios en otras latitudes.car