Las deudas sociales del Perú

Editado por Maite González Martínez
2021-05-18 08:54:15

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Pedro Castillo y Keko Fujimori a segunda vuelta presidencial en Perú

Por María Josefina Arce

Un país con una mayor tasa de pobreza, desempleo y muchas otras deudas sociales es el escenario que encontrará quien resulte ganador el 6 de junio venidero en la segunda ronda de las elecciones generales en el Perú entre los candidatos Pedro Castillo, de Perú Libre, y Keiko Fujimori, de Fuerza Popular.

La nación concluyó el 2020 con una contracción de su Producto Interno Bruto de 11,1%, la mayor de los últimos 30 años, de acuerdo con datos oficiales.

Las medidas de confinamiento para evitar la propagación de la COVID 19, que también mantuvo en jaque al país y dejó al descubierto la precariedad del sistema sanitario, incidió en los hogares más humildes, que al estar muchos vinculados al trabajo informal vieron esfumarse su fuente de ingresos. 

No obstante, en el último año la informalidad, un viejo mal del Perú, creció 3 puntos porcentuales por la pérdida de numerosos empleos. Ahora el 75 por ciento de la población económicamente activa está en ese mercado laboral, sin garantías de ningún tipo.

La pandemia incrementó en 10 puntos porcentuales la pobreza. Tres millones de peruanos se sumaron en los últimos meses al ejército de pobres.

El Instituto Nacional de Estadísticas e Informática precisó que en Lima, la capital, se registró el mayor incremento del número de personas que no llegan a cubrir el costo de la canasta básica.

De acuerdo con las informaciones, antes de la pandemia uno de cada siete limeños era pobre, hoy esa proporción es uno de  cada cuatro.

Se han multiplicado las llamadas ollas populares, que en la mayoría de los casos funcionan por iniciativa de la misma población, pues las autoridades han ayudado poco.

La crisis política que vivía la nación desde antes de la pandemia se agravó aún en medio de la crisis sanitaria, interfiriendo en la respuesta para contener la enfermedad causada por el nuevo coronavirus y quedando en el olvido millones de familias.

Por demás, los diversos gobiernos peruanos descuidaron durante décadas los aspectos sociales. No invirtieron en la salud, muchas familias viven hacinadas y no tienen acceso al agua potable, un recurso siempre esencial, pero ahora de vital importancia para mantener las medidas higiénicas e impedir el contagio.

De acuerdo con las estadísticas, en el Perú más de tres millones de personas no tienen garantizado el preciado líquido y muchas solo cuentan con él por horas.

Ese es el panorama al que se enfrentará el próximo mandatario del país andino. La interrogante no es sólo quién se impondrá en las urnas el venidero día seis, sino si dará respuesta a los viejos problemas que enfrenta la sociedad por un sistema neoliberal que le está pasando la cuenta a millones de familias peruanas.

 


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