Por María Josefina Arce.
"Esta revolución es la revolución de nuestro pueblo; es la revolución de nuestros jóvenes...". Son palabras de un hombre grande, de una clara visión política, que siempre confió en las más nuevas generaciones. El líder histórico de la revolución cubana, Fidel Castro, supo ver en ellas la continuidad de los principios de las que les antecedieron.
Y a la largo de más de 60 años los jóvenes cubanos siempre han estado en la primera línea. Han librado intensas batallas en todos los terrenos, mostrando al mundo su capacidad de resistencia, dignidad y deseos de construir un país mejor, por el que lucharon nuestros antepasados.
En estos tiempos difíciles que desde Estados Unidos, a través de los medios digitales, se llama a acciones violentas en Cuba y se difunden noticias falsas, las nuevas generaciones vuelven a reafirmar su compromiso con la revolución y el futuro de la Patria.
El malecón de La Habana fue escenario de una nueva manifestación juvenil en defensa de nuestra soberanía e independencia y de apoyo a nuestro proceso revolucionario que, aún en las adversas condiciones impuestas por el genocida bloqueo, vela por los más elementales derechos humanos de todo un pueblo.
Cómo enfatizó un mensaje en Twitter de la Unión de Jóvenes Comunistas a tono con la convocatoria de la caravana:"Los tiempos difíciles son los que muestran la grandeza de los pueblos y Cuba, esta pequeña isla, se agiganta ante las dificultades."
Y los jóvenes se han crecido y han demostrado que con ellos se puede contar. Son incontables las historias de abnegación desde que hace más de un año se reportaron en territorio nacional los primeros casos de COVID 19.
Diariamente jóvenes de batas blancas luchan por salvar vidas, ante la compleja situación epidemiológica que presenta el país por la enfermedad causada por el nuevo coronavirus, que con sus distintas variantes no da tregua al mundo.
Son también quienes en cualquier rincón del planeta han llevado esperanza y han recibido el afecto y agradecimiento de muchos, que valoran altamente su profesionalismo, ética y sacrificio.
Estudiantes de medicina realizan diariamente pesquisas en las comunidades para detectar los posibles contagiados y brindarles una rápida atención, al tiempo de poner freno a la propagación de la pandemia.
Jóvenes son igualmente quienes apoyan en los centros de aislamiento y en las comunidades a los sectores más vulnerables como ancianos y mujeres embarazadas.
En la agricultura, las fábricas, los medios de comunicación y otros importantes centros libran las nuevas generaciones una constante batalla para que no se detengan los servicios más esenciales destinados a la población.
"Creo en ustedes" afirmó Fidel Castro y como siempre no estaba equivocado. Los jóvenes en Cuba han hecho y siguen haciendo historia. Están en primera línea defendiendo a su Patria y construyendo un futuro mejor.