Imgen / Meteored
Por: Guillermo Alvarado
Argentina será sede la semana próxima de la Cumbre Latinoamericana sobre Cambio Climático, una más que se realiza mientras los fenómenos meteorológicos se multiplican cada vez con más potencia y capacidad de destrucción, como el reciente huracán Ida.
El encuentro se realizará el 8 de septiembre y en él participarán varios gobernantes de nuestra región, así como el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, y el enviado especial de Washington para este tema, John Kerry.
La cita será dos meses antes de la Cumbre de Glasgow, Reino Unido, que muchos calificaron como una de las últimas oportunidades para salvar los Acuerdos de París, firmados en 2015, pero que todavía están pendientes de implementar en la mayor parte del mundo.
De hecho los expertos de la ONU ya advirtieron que la temperatura promedio del planeta será superior en 1,5 grados centígrados, con respecto a la era preindustrial, para 2030, una década antes de lo estimado.
Es decir que el calentamiento global está mucho más acelerado de lo previsto, lo que se nota, por ejemplo, en el deshielo de los polos, las sequías o las tormentas intensas.
Ejemplos de eso ocurrieron en Estados Unidos, uno de los países que más gases de efecto invernadero lanza a la atmósfera, donde de manera sucesiva se vivió una gran ola de calor en el noroeste, brutales incendios forestales en el oeste, mientras el sur y el este fueron azotados por el intenso huracán Ida.
Todavía se está luchando para restañar los grandes daños ocasionados por este meteoro, que provocó más de dos decenas de muertos en su paso desde Luisiana hasta Nueva York. Este es uno de los huracanes más fuertes que ha tocado suelo estadounidense en toda su historia.
En Nueva Orleans cientos de miles de personas sufrieron la interrupción del servicio eléctrico, situación que se repitió en Pensilvania y Nueva Jersey.
Cuando se pensaba que Ida había perdido fuerza, intensas lluvias y vientos se abatieron sobre Nueva York, donde hubo que interrumpir el servicio del tren metropolitano, el llamado metro, porque los túneles se inundaron, igual que las áreas bajas de muchos edificios.
El mismo presidente Joe Biden tuvo que admitir que hay evidencias claras de que el clima está cambiando.
La reunión de Argentina sería una oportunidad para debatir a fondo este problema, pero lo que suele ocurrir en este tipo de encuentros es que muchos van a pronunciar su discurso, sin escuchar el de los demás y menos aún hacer compromisos concretos para aliviar la situación.