Foto: Venezolana de Televisión
Por María Josefina Arce (RHC)
Las más de dos décadas transcurridas de la firma del Convenio integral de Cooperación Cuba-Venezuela, no ha mermado en su vitalidad y en los beneficios que reporta para ambos pueblos, en medio de las dificultades que enfrentan por las sanciones y persecución financiera de que son objeto por Estados Unidos.
Al pasar revista a estos 21 años tenemos que se han desarrollado 1487 proyectos en la salud, el deporte, la cultura, energía, biotecnología, industria y comercio.
Sin dudas, en el área sanitaria es invaluable el impacto que ha tenido en los venezolanos. Hasta la fecha han colaborado en esa nación suramericana más de 154 MIL profesionales de ese sector, provenientes de la Mayor de las Antillas.
De acuerdo con la Cancillería cubana, las consultas médicas rebasan el millón de millones, las cirugías practicadas los tres millones, de ellas un millón 089 MIL 544 han sido de la vista.
Pero lo verdaderamente relevante, más allá de las cifras es cuánto bienestar y cuánto ha significado para la salud de la población, especialmente para los sectores más humildes, el Convenio integral de Cooperación Cuba-Venezuela, que en estos complejos tiempos de pandemia ha posibilitado aunar esfuerzos y voluntades para enfrentar a la COVID-19.
Las brigadas médicas cubanas presentes en territorio venezolano fueron reforzadas con integrantes del Contingente internacionalista ‘Henry Reeve’, quienes laboraron el pasado año en zonas rojas de los Centros de Diagnóstico Integral en la atención a los contagiados con la enfermedad causada por el nuevo coronavirus.
Personal sanitario cubano fortaleció, además, la atención primaria en los consultorios populares de las comunidades más vulnerables.
También con ayuda del país caribeño se habilitó en 2020 en Guarenas, departamento de Miranda, un Laboratorio de Biología Molecular, lo que posibilitó incrementar los diagnósticos de COVID-19.
La instalación radica en el Centro Nacional de Genética Médica, doctor José Gregorio Hernández, fundado en 2009, en el marco del Convenio integral de Cooperación entre las dos naciones.
La colaboración ha abarcado igualmente la necesaria vacunación para frenar el virus. La Mayor de las Antillas ha enviado al pueblo venezolano a Abdala, su primer inmuno, de probada eficacia y producido por el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología.
El convenio entre Cuba y Venezuela sentó asimismo, las bases y principios para la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos, que ha dado vida a un nuevo tipo de relaciones, basado en la solidaridad.
Trascendental fue la firma hace 21 años de este Convenio por el líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro (1926-2016), y el presidente venezolano Hugo Chávez (1954-2013), que ha estrechado los vínculos de amistad entre los dos pueblos y demostrado que es posible construir una América mejor.
