En medio de acentuadas restricciones materiales, la economía cubana trata de hallar vías hacia su potenciación, cuando algunos índices globales arrojan atisbos en sentido correcto.
De acuerdo con fuentes oficiales, en el primer trimestre del año en curso la economía cubana creció 10,9 por ciento.
Pero el efecto positivo es relativo, porque la estadística se compara con etapas cuando el país estaba paralizado por la pandemia del nuevo coronavirus.
Se tiene en cuenta que si bien el aumento señalado pone de relieve un modesto despegue de la economía, todavía los resultados se alejan de los reportados en 2019, año anterior al surgimiento de la pandemia por
No obstante, la mayor de las Antillas inquiere por diversas vías ampliar la disponibilidad de divisas, un déficit que arrastra desde hace años ante el recrudecimiento del bloqueo estadounidense, asociado posteriormente a los gastos derivados del enfrentamiento a la pandemia.
Para encontrar esa moneda dura el parlamento aprobó propuestas del gobierno, con implicación para las empresas estatales y privadas así como la población.
Entre las decisiones destaca el restablecimiento del mercado de compra y venta de divisas, incluyendo el dólar en efectivo.
En opinión del viceprimer ministro y titular de Economía y Planificación Alejandro Gil, el mercado cambiario contribuirá a la prosperidad, al captar una parte de las divisas que entran a Cuba.
Cuba, además, proyecta que con el mercado cambiario el peso nacional adquiera su valor, a lo que también coadyuvará el mejor desempeño de los nuevos actores económicos, entre ellos las micro, pequeñas y medianas empresas, una parte privadas, autorizadas a exportar productos.
Las autoridades cubanas estiman que con las iniciativas recientemente incorporadas aumentarán los canales de financiamiento para calzar una mayor oferta de bienes y servicios en el mercado interno.
De esa forma podrían aliviarse algunas escaseces reinantes y afrontar un proceso inflacionario que castiga el poder adquisitivo.
Según datos oficiales, Cuba tuvo una inflación de 77 por ciento en 2021 y de 13 por ciento en los primeros meses de 2022, tendencia perjudicial que responde también al alza de los precios en el mercado internacional.
En la presente coyuntura espinosa, los cubanos trabajan para mitigar sus efectos y enfatizan en sostener el modelo inclusivo de desarrollo, el cual si bien NO permite atender todos los requerimientos de inmediato, busca respuestas a situaciones apremiantes de personas y comunidades vulnerables.
