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Por: Roberto Morejón
Los cubanos tienen a su consideración otro anteproyecto de ley, relacionado con la comunicación, sobre el cual pueden expresar criterios, como parte del desempeño democrático.
El Anteproyecto de Ley de Comunicación Social es un texto que para nada representa un coto exclusivo de los trabajadores de la prensa y comunicadores en general.
Los redactores de la futura normativa han tenido presente
Mediante correo electrónico, los cubanos pueden opinar independientemente de que en los círculos de la prensa y la comunicación en general se discuta el articulado de la venidera ley.
Está planteada la posibilidad de emitir juicios acerca de un contenido que busca trazar un nuevo vínculo entre las instituciones, las fuentes de información y los medios de prensa, con apego a la ética y verosimilitud en el aporte y procesamiento de datos.
Mediante la ordenanza se presentan mayores garantías para los destinatarios de la información, pues los funcionarios estatales NO tendrán excusas para eludir su rendición.
De acuerdo con los objetivos señalados, Cuba está a las puertas de extender los procesos de comunicación a fin de robustecer los caminos del diálogo y la intervención de los individuos en la transformación de la sociedad.
Lo anterior se vincula con el énfasis de una parte del articulado en la comunicación en el ámbito comunitario.
Hablamos de un aspecto relevante cuando en la mayor de las Antillas se le concede a los municipios un papel decisivo en la gestión de gobierno.
Desde esas jurisdicciones deben hacerse labores de mejoramiento de las condiciones de vida y alentarse la generación de ideas para enfrentar los obstáculos en la construcción del socialismo.
No quedó al margen del Anteproyecto de ley de Comunicación Social el hincapié en el rechazo a la extendida colonización cultural en el mundo.
El texto lo hace a sabiendas de que la labor en tal sentido será ardua, dado el poderoso andamiaje de la industria de la propaganda y frivolidad, irradiada desde el Norte industrializado.
Para Cuba, blanco de la hostilidad de Estados Unidos, contar con una Ley de Comunicación Social contribuirá asimismo a desmontar programas de subversión.
De manera que en esta nación caribeña debaten hoy y es posible aprobar un precepto legal enriquecido en la base, capaz de mejorar los procesos y prácticas de la comunicación.