Cubadebate
Por: Roberto Morejón
Los cubanos, en especial los residentes en la provincia de Matanzas, confían en que la base de supertanqueros, objeto de un accidente, volverá a recuperarse, aunque la magnitud de los daños y las inversiones en curso son considerables.
El enclave en el que depositan su carga buques cisterna y posee varios tanques de combustible sufrió un voraz incendio el cinco de agosto, con el resultado de 17 personas fallecidas y cuantiosas pérdidas materiales.
El siniestro, que mantuvo en vilo a los cubanos por varias semanas, destruyó cuatro de los depósitos, edificaciones, sistemas eléctrico y telefónico y viales, para obligar a un titánico esfuerzo, primero para controlar las llamas y después con vista a resarcir los daños.
Centenares de obreros y técnicos laboran en Matanzas mientras la luz del día se los permite para devolver la normalidad a la devastada infraestructura hidráulica, eléctrica y telefónica y demoler estanques calcinados.
Las faenas son engorrosas, se concretan en condiciones complejas, y fue indispensable trasladar hacia otros sitios talleres y laboratorios dañados por el fuego, en medio de gran despliegue de recursos técnicos y especialistas.
Hablamos de remover metales torcidos, tierra adherida, desperdicios y petróleo quemados y de un suelo que inicialmente adquirió color oscuro, aunque la tonalidad ha comenzado a atenuarse con el adelanto de las obras.
Supervisada la misión por altos dirigentes del país, la base de supertanqueros de Matanzas despega hacia un estatus de más desarrollo y modernidad, con el aval de disponer de adicionales mecanismos de salvaguarda ante inclemencias del tiempo y accidentes.
El asentamiento industrial sufre una importante reconstrucción para lo que se acometen los proyectos posibles, gracias a los cuales ya el compromiso se cumple en 60 por ciento.
Los testigos del peligroso incendio confirman la evolución del lugar, adonde llegó recientemente el presidente Miguel Díaz-Canel.
El Jefe de Estado resaltó lo que llamó aspecto diferente de la zona industrial de Matanzas y reveló que los expertos erradican vulnerabilidades.
De manera que después del doloroso accidente, los cubanos honran la memoria de los fallecidos, a quienes la población les rindió honores, con la restauración de una plataforma industrial, importante para el aseguramiento energético y la economía de la nación.