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Por María Josefina Arce

"Aspiramos a un nuevo orden mundial, basado en la justicia, la equidad y la paz..." afirmó el líder histórico de la revolución cubana, Fidel Castro, y ese ha sido un compromiso permanente de Cuba, que  ha defendido en tribunas internacionales, durante su liderazgo de mecanismos regionales y con sus acciones solidarias  a lo largo de décadas.
   
Ahora como presidenta pro tempore del Grupo de los 77+China, responsabilidad asumida a principios de  este año, busca la Mayor de las Antillas aunar esfuerzos para juntos hacer frente a desafíos comunes y trabajar por el bienestar de nuestros pueblos, en medio de un mundo cada vez más egoísta.
  
Con ese objetivo en las últimas horas se dio a conocer la convocatoria para septiembre venidero en La Habana de la Cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de las naciones miembros de este bloque negociador y de concertación política.
  
Al respecto el presidente cubano, Miguel Díaz Canel, afirmó que esta será una ocasión propicia para reforzar la unidad y concertar acciones para la búsqueda de soluciones a los problemas más acuciantes del mundo de hoy.
   
La pobreza, el analfabetismo, las desigualdades en el acceso a servicios básicos para una vida más digna son problemáticas de los países menos desarrollados, que como recordara el mandatario cubano se ven marginados de los beneficios que reportan la ciencia, la tecnología y la innovación para el desarrollo.
   
Por eso la cita de la  capital cubana tendrá como lema "Retos actuales del desarrollo: Papel de la ciencia, la tecnología y la innovación", aspecto esencial para avanzar hacia un progreso sostenible.
   
Cuba no sólo ha insistido sobre la necesidad de unas nuevas relaciones internacionales en las que prime la solidaridad, sino que es este un principio básico de su política exterior, que se ha materializado en la ayudar sin condiciones, a todo aquel que lo necesite y en poner sus logros y experiencias al alcance de todos.
  
La pandemia de la COVID 19 mostró la justeza de esa posición, al evidenciar que los graves problemas internacionales sólo se pueden resolver a través de la cooperación, pues las grandes transnacionales capitalistas lucrarán con cualquier tema que les reporte beneficios.
  
De ahí que Díaz Canel, en la convocatoria de la cita de La Habana, enfatizara que de esa solidaridad están urgidos los miembros del Grupo de los 77+China, que en su conjunto representan 80% de la población mundial y más de dos terceras partes de la membresia de la ONU.
  
Hacer avanzar los intereses comunes del Sur es una prioridad de Cuba al frente del bloque y para ello su voz se escucha en las diversas tribunas internacionales, pero también trabaja en pos de proyectos que beneficien a las naciones miembros.
  
En casi  seis meses de presidencia, el país caribeño ha sido partícipe de momentos importantes para el Grupo como su asistencia a diversos encuentros en el marco de la ONU, y organizado en territorio cubano reuniones de los ministros de Educación, Turismo y de Cultura.
    
La cita de septiembre será otra oportunidad para seguir avanzando en la concertación de acciones conjuntas y aunar posiciones para que se escuche con fuerza  la voz del Sur.