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Por María Josefina Arce
Apenas cuatro días separan a Uruguay de las elecciones generales, y las distintas encuestas de opinión coinciden en que el opositor Frente Amplio lidera la intención de voto de cara a la designación del nuevo presidente del país suramericano.
Los diferentes sondeos de opinión revelan que el candidato del Frente, Yamandú Orsi, marcha al frente con cerca de 44%.
La organización política, que gobernó de 2005 a 2020, tiene como programa de imponerse en los comicios atender los bajos salarios, reforzar la seguridad social y destinar mayores recursos a la educación y la salud, así como un crecimiento de la economía.
Veinte puntos más abajo de Orsi se sitúa su más cercano rival, Álvaro Delgado, del Partido Nacional, de la coalición de gobierno, con 24%.
Para los demás contendientes por la presidencia, once en total se presentan a estos comicios, las encuestas dan mejores opciones a Andrés Ojeda, del Partido Colorado, también de la coalición gubernamental, quien, señalan, ha ido subiendo, tras una intensa campaña en redes sociales y otros medios.
De ningún candidato lograr más del 50% de los sufragios, habrá que ir a una segunda vuelta electoral en noviembre próximo, una posibilidad que parece dominar por el momento el panorama de la nación, donde varios medios de prensa señalan poco entusiasmo de la ciudadanía.
De acuerdo con las informaciones, entre diez y 14 por ciento se ubica el número de quienes no tienen decidido su voto, de carácter obligatorio por mandato constitucional.
Los cerca de tres millones de uruguayos convocados a las urnas también deberán elegir a los 99 miembros de la Cámara de Diputados y los 30 del Senado.
La jornada de este domingo estará matizada por dos plebiscitos, uno sobre el sistema pensional, que podría adelantar la edad de jubilación, promovido por la central sindical PIT-CNT, y otro propuesto por la coalición gubernamental que daría luz verde a los allanamientos nocturnos.
Faltan pocos días para que se despeje la incógnita de si el próximo presidente de Uruguay, que gobernará de 2025 a 2030, será elegido en primera vuelta o habrá que ir en noviembre al balotaje.
