Colombia COP16

Por María Josefina Arce

"Paz con la naturaleza" es el lema de la Cumbre sobre la Biodiversidad, que transcurre en la ciudad colombiana de Cali y que para los especialistas debería marcar un cambio en la relación del hombre con el planeta y las diversas formas de vida que lo habitan.

El planeta no va por buen camino en el manejo y la conservación de la biodiversidad,  así lo ha manifestado el secretario general de la ONU, António Guterres; y lo cierto es que las estadísticas muestran un panorama nada alentador.

De acuerdo con la Universidad de las Naciones Unidas, las intensas actividades humanas,  como el cambio en el uso del suelo, la sobreexplotación de los recursos naturales, la contaminación y la introducción de especies invasoras están provocando una acelerada extinción de distintas especies de plantas y animales.

En  los últimos cien años, por ejemplo, se han perdido más de 400 especies de vertebrados en el mundo. Y según la  Lista Roja, de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza,  en la actualidad sólo en América del Sur hay cuatro MIL 445 especies en peligro de extinción, de ellas 665 están bajo la categoría de peligro crítico.

Un aspecto esencial que busca promover la Cumbre es resaltar y que se tenga en cuenta  el importante papel que tienen en la preservación  de la naturaleza los pueblos indígenas, verdaderos guardianes de la Tierra.

Muchas veces desalojados de sus territorios ancestrales y discriminados en todos los aspectos, los pueblos originarios contribuyen con sus prácticas respetuosas y amigables con el medio ambiente a la conservación de 80% de la biodiversidad del planeta.

La cita de Cali tiene la tarea, apuntan los especialistas, de idear mecanismos de seguimiento y financiamiento que garanticen el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible  trazados por la ONU para el mundo.

Pues la destrucción de la naturaleza conlleva a un aumento de las enfermedades, el hambre, las desigualdades y el cambio climático, con sus negativos impactos.

Como afirmó el presidente colombiano, Gustavo Petro,  "la única razón de ser de la humanidad es la vida misma, cuidar la vida y no destruirla".

Pero habrá que ver hasta donde están dispuestas a llegar  las naciones, sobre todo las más desarrolladas, para poner un freno a la pérdida de las distintas formas de vida en el planeta.