Venezuela, Operación Guaidó-Dos

Editado por María Candela
2025-01-10 09:42:46

Pinterest
Telegram
Linkedin
WhatsApp

Foto: SurySur

Por: Roberto Morejón

Por acción de la extrema derecha venezolana, gobiernos de esa tendencia en América Latina, la administración estadounidense saliente y los grandes medios de comunicación de Occidente, se ha querido dibujar una atmósfera de tensión en torno a la toma de posesión de Nicolás Maduro el 10 de enero.

La frenética campaña se enfila contra la determinación del Consejo Nacional Electoral y de la Corte Suprema de Justicia, acerca de los resultados de la votación el pasado 28 de julio, favorables a Maduro.

En el país sudamericano no hay debates jurídicos sobre el carácter o la legalidad de la investidura de Maduro.

Lo demás forma parte de una gran nebulosa, tejida por los extremistas, con la dirigente opositora María Corina Machado al frente.

Esta última, la dama con mano de hierro, maneja al candidato opositor Edmundo González Urrutia, quien como parte del tinglado se declara victorioso en los comicios.

Machado, quien afirma ser amiga del ultraderechista presidente argentino, Javier Milei, confesó su cercanía y contactos frecuentes con los exponentes de la administración estadounidense saliente.

Artífice de la alternativa de fuerza en las calles y con la frustrada ambición de dividir a las fuerzas armadas venezolanas, está detrás de las protestas violentas posteriores a la última jornada electoral.

Ahora ella y su adjunto González Urrutia han desplegado una campaña internacional con viajes de este último, sin revelar quién pagó la logística, aunque los buenos entendedores saben el origen.

El adornado “presidente electo” González Urrutia es una versión más añejada de Juan Guaidó, el ex diputado convertido en “primer mandatario” años atrás, cuando “juró” en una plaza pública de Caracas, y no en la Asamblea Nacional.

Sobre González Urrutia pesa un pedido de detención de la Justicia de Venezuela por complicidad en actos violentos, usurpación de funciones y desconocimiento de las instituciones del Estado, entre otras imputaciones.

La corte acompañante de Miley, Biden, Lacalle Pou y otros solo busca reeditar el desintegrado Grupo de Lima, que acompañó los planes y sanciones de Estados Unidos contra Venezuela.

No por casualidad, el presidente Maduro acusó al gobierno saliente de Estados Unidos de financiar acciones contra el país sudamericano, a lo que se añaden informes sobre detenciones de mercenarios extranjeros, envueltos en planes desestabilizadores.

Y el Jefe de Estado se preguntó oportunamente, “¿qué le ofrecen a Venezuela, recolonizarla, gobernarla ellos, dirigirla ellos a través de un títere?”.



Comentarios


Deja un comentario
Todos los campos son requeridos
No será publicado
captcha challenge
up