Imágen: Archivo.
Por María Josefina Arce.
La Organización Meteorológica Mundial advirtió que en el año recién concluido las consecuencias del cambio climático fueron visibles en todo el planeta.
Celeste Saulo, secretaria general de la entidad mundial, apuntó que el cambio climático se manifiesta ante nuestros ojos casi a diario en un aumento de la incidencia y el efecto de los fenómenos meteorológicos extremos.
La amenaza es aún mayor para las naciones insulares como Cuba, que paradójicamente son las menos emisoras a la atmósfera de gases de efecto invernadero.
De ahí que la nación caribeña dedique una especial atención a este fenómeno, y aún en las difíciles condiciones que genera el bloqueo norteamericano se prepare para los cambiantes escenarios del clima.
Desde hace años el país desarrolla diversos proyectos, como "Mi Costa" para aumentar la resiliencia ante los efectos del cambio climático y desde 2017 cuenta con Tarea Vida, politica del Estado para enfrentar esta amenaza.
Este plan, sustentado sobre una base científica multidisciplinaria, contempla cinco acciones estratégicas y 11 tareas.
Ahora el Instituto de Geofísica y Astronomía de Cuba actualizó 12 estudios de peligro, vulnerabilidad y riesgos que constituyen la base para precisar medidas de adaptación.
Esta actualización de las investigaciones abarca a los seis municipios costeros de La Habana. Es así que, de acuerdo con los expertos, permitió el diagnóstico ambiental con perspectiva de género e Inclusión social en Plaza, Playa, Centro Habana, Habana Vieja, Regla y Habana del Este, donde en total habitan más de 700 mil personas.
Se incluyó, refieren las informaciones, la caracterización y evaluación en la zona costera de La Habana del carso, un término que de acuerdo con los especialistas define el conjunto de fenómenos y procesos que ocurren bajo la acción del agua en lugares de rocas solubles.
En este aspecto se hizo énfasis en el peligro, vulnerabilidad y contingencias de desastres por derrumbes y hundimientos potenciales, situaciones asociadas a la elevación del nivel del mar y de las aguas subterráneas.
Cuba se mantiene atenta, y aún en medio de una compleja situación económica ajusta sus proyectos de desarrollo para mitigar los efectos del cambio climático e incorporar a toda la población a esta imprescindible tarea.