Por María Josefina Arce
Se acerca el mes de febrero y los cubanos esperan con ansias la Feria Internacional del Libro de la Habana, que en su trigésimo tercera edición estará dedicada a Sudáfrica, un buen motivo para referirnos a los entrañables lazos de hermandad existentes entre los dos países.
Sin dudas en el corazón del pueblo sudafricano está el cubano, cuyas sangres se unieron en la lucha por el fin del oprobioso sistema del apartheid y por la independencia, soberanía y la justicia en África.
El líder sudafricano y luchador antiaparteid, Nelson Mandela, siempre destacaría que los cubanos llegaron a las lejanas tierras africanas como doctores, maestros, soldados, expertos agrícolas, nunca como colonizadores.
Profundos y especiales son los nexos entre los dos Estados. Las relaciones diplomáticas se establecieron el 11 de mayo de 1994, un día después de que Mandela asumiera como el primer presidente negro de Sudáfrica, tras ganar las primeras elecciones multirraciales en ese territorio.
Desde ese momento se continuarían fortaleciendo unos vínculos que se remontan a la década del 60 del siglo pasado, cuando la naciente revolución cubana condenó la encarcelación de Mandela y sus compañeros de lucha.
La salud ha sido uno de los pilares de la cooperación de Cuba con Sudáfrica, donde los profesionales cubanos han ayudado a mejorar los índices sanitarios y a elevar significativamente la calidad de vida de muchas comunidades.
A los trabajadores cubanos de la salud presentes en territorio sudafricano se sumó en 2020 una brigada del Contingente Internacional Henry Reeve para combatir la pandemia de la COVID 19.
En reiteradas ocasiones Pretoria ha destacado la ayuda en materia de salud brindada por Cuba, la cual ha calificado como un referente de las relaciones Sur-Sur.
Pero la colaboración bilateral se extiende a otras esferas como la educación, que abarca a los distintos niveles de la enseñanza.
Cuba y Sudáfrica mantienen unos excelentes lazos de amistad y solidaridad, expresada en diferentes órdenes, como la condena al inhumano bloqueo de Estados Unidos contra el pueblo cubano.
Ambos países han manifestado su disposición de continuar profundizando los vínculos para beneficio de sus ciudadanos.