Por: Alfonso Cadalzo Ruiz
Aquel martes 22 de agosto de 1922 junto con el tradicional cañonazo de las 9, las ondas de nuestra radio surcaron el éter de forma continuada. Este acontecimiento de trascendencia única había estado precedido de transmisiones de técnicos y de radioaficionados.
La inauguración oficial aconteció en abril del año siguiente, pero el hecho que marcó un hito en la radiodifusión de Cuba tuvo lugar, sin dudas, aquel 22 de agosto.
Correspondió al compositor Luis Casas Romero, creador de la Criolla como género musical, y subdirector de la Banda del Estado Mayor del Ejército Nacional, convertirse una de nuestros primeros radiofonistas.
La 2LC despegó ofreciendo el estado del tiempo y la hora, a lo que sumó poco después un boletín de noticias que incluía el acontecer deportivo; este fue el sello esencialmente informativo y de servicio público que nos ha identificado desde entonces, tomando en cuenta la circunstancia históricas de cada etapa.
Con su nacimiento también apareció la profesión de la locución encarnada en Luis y Zoila Casas Rodríguez, hijos del fundador. Nos corresponde el orgullo de contar con la primera mujer que ejerció la locución en toda América Latina; hecho que corrobora cómo nuestras féminas han estado y están presentes en cada latido de nuestro quehacer nacional, ocupando la primera fila.
La historia de la Radio Cubana es tan extensa como hermosa, ilustrada en muchas ocasiones por momentos heroicos, como fueron la toma de Radio Reloj por José Antonio Echeverría y los jóvenes del Directorio Revolucionario, nuestra Radio Rebelde desde la Sierra – creada por el Che a iniciativa de Fidel – , aquella alocución histórica de Fidel en Santiago de Cuba el primero de enero de 1959 y su primer discurso el día 8 a su llegada a La Habana, también transmitido por televisión.
Lo eminente de la Radio Cubana, que hace aún más hermosa su historia y evolución, es que su devenir marcha al unísono de nuestra vida nacional. No existe un solo acontecer local, nacional o extranjero que no sea captado y emitido por ella con el más elevado sentido de la ética profesional.
Nuestra Radio Cubana se multiplica a lo largo del tiempo. La Revolución se encargó de dignificarla, llevando a cada rincón del país lo más reciente en tecnologías, formación académica y niveles de realización. Hoy contamos con una radio que como vocación y anhelo sirve al pueblo constituida en portavoz de un proyecto social único, como jamás se ha conocido en este continente y su área insular.
Es un día de regocijo; de sentirnos satisfechos y capaces de saber que cada día trabajamos para perfeccionar nuestro quehacer con productos radiofónicos superiores.
Hace hoy 94 años somos la Radio Cubana y seguiremos fieles a la herencia de todos los que nos precedieron, entregando lo mejor de nosotros a esta profesión responsable y noble.
Razones muchas para tan grande alegría
(Tomado del portal de la Radio Cubana)