Por: Marianela Samper
La Habana, 26 mar (RHC) 60 años de los Órganos de la Seguridad del Estado, continuidad de la que estableciera el Ejército Rebelde contra los crímenes de la tiranía y que en plena Revolución fue creando un cuerpo de hombres y mujeres con la misión de preservar los intereses del pueblo y defender la soberanía del país, así como el sistema que los propios cubanos eligieron.
Artífice de esa importante dirección del Ministerio del Interior fue el Comandante en Jefe Fidel Castro, quien no solo dirigió operaciones, también sustentó que ese órgano debía nutrirse de la vanguardia revolucionaria.
A lo largo de estos seis decenios la historia ha mostrado el papel desempeñado por la seguridad cubana en impedir los planes de atentados contra nuestros principales dirigentes, en particular más de 600 contra Fidel que fueron desarticulados.
También guerra sicológica, bombardeos a ciudades, aeropuertos, sabotajes a la economía, invasiones militares, infiltraciones de terroristas, bandas de alzados, introducciones de plagas y enfermedades, entre otras forman parte de la lista de agresiones acumuladas contra el pueblo y su Revolución.
El saldo de unas 3 mil 400 víctimas y más de 2 mil mutilados e incapacitados. El tiempo transcurrido no ha disminuido la beligerancia de Estados Unidos contra Cuba.
Raúl Antonio Capote, agente Pablo para la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos y Daniel para la seguridad cubana, recuenta su historia, que pone de manifiesto la verdadera finalidad de los sucesivos gobiernos de Washington, en este caso con el Proyecto Génesis y el interés de derrocar a la Revolución.
“Mi generación para nada conformista, es la de los 5 héroes, la del internacionalismo hacia otros pueblos. Siempre rebeldes, afirma Capote, crecimos con el ejemplo del Ché y el combate a lo mal echo. Y esas características parece se ajustaban a los propósitos del enemigo".
Destaca un momento importante, en mayo del 2004, año que califica de los más agresivos de la política de Estados Unidos hacia Cuba con el Presidente George W. Bush, simliar a la de estos tiempos, comenta.
Arreciaba el bloqueo y hasta amenazaba con una confrontación militar. En tanto en La Habana, frente a la Sección de Intereses de Estados Unidos, Fidel daba a conocer al pueblo un llamamiento a la defensa del país.
En ese contexto recuerda Capote una reunión con personal de la SINA, a la que acudieron oficiales de la Agencia central de Inteligencia para plantear cambios en la forma de enfrentar la Revpolución porque todas las medidas aplicadas habían fracasado y apostarían a otro escenario, a más largo plazo, cuando no dirigiera la generación histórica en Cuba.
Nacía así el Proyecto Génesis para la formación de nuevos líderes para el cambio en el país. Buscaban una masa crítica de personas a las que prepararían en cursos en el exterior y una vez graduados en sus centros de trabajo o localidades de residencia estuvieran desmovilizados y plantearan cambio de sistema político con la sucesiva agenda detrás, que va desde los golpes suaves hasta la presencia militar en el país.
Gracias a los servicios de la seguridad del estado y personas de pueblo, como el Agente Daniel, entre otros, se denunció y abortó el proyecto.
Lo más importante, subraya el intelectual, es que el pueblo comprometido, con convicciones, con la fuerza de la historia y sin cobrar un centavo, es el que integra las filas de los Órganos de la Seguridad del Estado, para defender su Revolución.
De ahí la diferencia entre nuestra institución y la de otros lugares, es un escudo de principios que no han podido derrotar en 60 años.
En este 26 de marzo, día fundacional de los OSE, Raúl Capote expresa el orgullo de pertenecer a esas filas, recuerda a aquellos que sin rostro aún continúan su labor dentro del enemigo en defensa de su país y aquellos que entregaron sus vidas, muchos de ellos en total anonimato hasta para sus familiares.
“A todos nos mueve la lealtad a Fidel, a Raúl, a la Revolución y un amor infinito por Cuba.” dijo el agente Daniel, quien ha escrito varios libros e insiste en que de tantos hechos e historias de combatientes es bueno enseñar a las nuevas generaciones para que conozcan las razones que los motivó a pertenecer a la Seguridad del Estado y aprendan que el enemigo, aunque pasen los años, mantiene el mismo objetivo. Pero no lo van a lograr.”