Por. Danercy Rodríguez Roque
La Habana, 1ro Mayo (RHC) "Ya Cuba tiene una planta de radio que hoy se está ya transmitiendo a toda la América Latina, y esto lo están oyendo innumerables hermanos de América Latina y en todo el mundo, no por suerte no estamos en la época de la diligencia. Estamos en la época del radio y las verdades se pueden llevar muy lejos."
El fragmento anterior del discurso pronunciado por Fidel Castro para despedir el sepelio de las víctimas de los bombardeos a la base aérea de San Antonio de los Baños y los aeropuertos de Ciudad Libertad y Santiago de Cuba, preludio de la agresión mercenaria de "Bahía de Cochinos", anunciaba al mundo el 16 de abril de 1961 la apertura de las emisiones radiales cubanas al exterior con la creación de Radio Habana Cuba, "Una voz de amistad que recorre el mundo".
Con el triunfo de enero de 1959, el viejo sueño de los "barbudos de la Sierra" se convierte en una tarea medular para la dirección del país: concretar la puesta en marcha de Radio Habana Cuba, la voz de un pueblo en Revolución y, por ello, también la voz de todos los que en el mundo luchan contra el imperialismo y por su autodeterminación.
Aunque de manera oficial surge el primero de mayo de 1961, Radio Habana Cuba, ha logrado desde sus inicios un poder impresionante en materia de influencia comunicativa; millones de personas se han servido de esta radio emisora con potencia suficiente como para llegar a diferentes naciones con la verdad de la Revolución cubana.
En la actualidad su colectivo explota la creatividad e impone un halo de complicidad a través de las voces de la música, y de la creación de diversos climas, en los que oyente y locutor entablan una relación muy cercana a pesar de no estar frente a frente, pero la magia de la radio lo consigue como sí lo estuviesen.
El gran desafío al que se enfrenta hoy tiene que ver con no perder su presencia en la información frente a los nuevos medios digitales, y esto es posible a partir de la incorporación de las nuevas tecnologías y formatos de comunicación a sus contenidos.
Abrirse camino en la web a través de transmisiones que lleven la radio con la posibilidad de incorporar imagen, lo cual aunque quiebre un poco con la magia de antaño, no deja de ser atrayente para los oyentes ver a sus presentadores y locutores en vivo.
Por otra parte, incursionar mediante aplicaciones móviles en dispositivos de uso cotidiano como el celular y mantener un espacio propio en las redes sociales, es algo que nos permite acercarnos a sectores más jóvenes que ven a la radio como un medio del siglo pasado.
