Imagen / RHC/ Mireya Ojeda
Por: Mireya Ojeda Cabrera
Cienfuegos, Cuba.- Para minimizar los efectos del bloqueo se contribuye a la producción de alimentos sembrando en patios y parcelas de viviendas respondiendo al movimiento Cultiva Tu Pedacito, creado por la Dirección Nacional de los Comités de Defensa de la Revolución.
Gran cantidad de familias cubanas muestran en la fachada, la pegatina que las identifica dando duro en la agricultura.
Hace pocos días estimulamos a varios residentes en el barrio cienfueguero de Playa Alegre, y entre ellos al General de Brigada de la Reserva, Marcelo Verdecia Perdomo, Presidente de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana en la provincia del centro y sur.
Al escribir estas líneas lamentamos la desaparición física de Verdecia, quien falleció este 20 de julio.
El General acumuló una historia impresionante. A los 17 años se incorporó al Ejército Rebelde. Estuvo con el Comandante en Jefe, Fidel Castro Ruz, y al Triunfar la Revolución fue su escolta personal y lo acompañó hasta La Habana.
Recientemente recibió el título honorífico Héroe del Trabajo de la República de Cuba, de manos del Primer Secretario del Comité Central del Partido, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, Presidente de la República.
Imagen / RHC / Mireya Ojeda
Un solar productivo
“Mi solar no está muy bueno, comentó porque se encuentra cerca de la playa, lleno de cangrejos, pero ¡Mira, en estos momentos tengo más de trece racimos de plátano burro ahí y tres o cuatro para cortar!
“Tengo mangos, plátano fruta ¡Oye, de todo y mucho de lo que ves ahí tengo que producirlo en alto porque se lo comen los cangrejos. Pero produzco!
“¡Y tú me estás mirando ahora, que cuando llegaste aquí yo venía con un machete y una mocha, de allá atrás precisamente y eso es lo que hago cuando llego del trabajo, en mi casa!
“Creo que es un aporte que estamos dando, un poquito allá, un poquito acá, lo hacemos para ayudar a resolver en algo la necesidad que tiene nuestro pueblo, porque la situación de nuestro país no es buena”.
Se refirió al duro bloqueo que mantiene el gobierno de Estados Unidos hacia Cuba, que nos provoca tantas afectaciones, y mostró a los visitantes las siembras también de limones, guayabas, naranjas, frijoles y plantas medicinales en medio del platanal, con sus grandes racimos.
Invitó a un recorrido hasta el fondo del solar e indicó” ¡Aquí tienes dos racimos casi juntos, míralos ahí arriba. Son como 14 racimos!- ¡Mira Mireya! Tiene un racimo aquí, Pero mira tienes dos del lado de allá”.
Y sus palabras plenas de entusiasmo y admiración por el fruto de su trabajo en aquel pedacito de patio, sin condiciones casi para el cultivo. “Y seguro estamos de que venceremos, Mireya, para adelante”.
¿Qué extensión tiene tu patio? “Es un solar, respondió, te voy a decir… 20 por cuatro, tiene como ochenta metros cuadrados”.
¿Y trabajas solito aquí? “Sí, normalmente, además soy campesino, me alcé. Yo soy de la Sierra Maestra.
“Mis primeros cinco o seis años fueron trabajando en el campo, a destajo junto con la familia para ayudar a mantener a mis hermanos. Eran tres y yo el cuarto porque éramos huérfanos. Quedé huérfano a los cinco años de madre y mi papá se afectó de la cabeza.
“Y ahora lo hago con gusto y entusiasmo, como tú me verás ¡Mira, aquí estoy, palante, con fe y optimismo, venceremos!”
Me parece estar mirándolo caminar ágil, por el solar y vestido con aquella ropa propia para trabajar en el campo, a Marcelo Verdecia Perdomo quien en 1938 nació en el municipio Bartolomé Masó, de la provincia Granma y luego de batallar por la vida y por Cuba, se convirtió en un cienfueguero.