Por: María Josefina Arce
El 2024 se ha caracterizado por un gran acompañamiento a Cuba en su lucha contra el bloqueo norteamericano. Condenas de gobiernos, personalidades y pueblos, así como múltiples acciones de solidaridad se registraron a lo largo del año, en el que la nación caribeña obtuvo una nueva y rotunda victoria en la ONU.
Por trigésimo segunda ocasión la Asamblea General de la ONU aprobó el proyecto de resolución presentado por Cuba sobre la necesidad de poner fin al cerco económico, que solo de marzo de 2023 a febrero de 2024 provocó pérdidas al país por más de 5 mil millones de dólares, una cifra que representa un incremento de 189 millones de dólares con respecto al periodo anterior.
Ciento 87 naciones votaron a favor de poner fin a la unilateral y cruel medida, que afecta todos los ámbitos de la sociedad. Ningún sector escapa de su impacto, que se siente con especial fuerza en la salud, educación, la industria, agricultura y el sistema electroenergético.
Una vez más quedó en evidencia el aislamiento de Estados Unidos, pues en su política hostil hacia Cuba, solo contó con el apoyo de Israel, su socio incondicional. Hubo una abstención que fue Moldavia.
Representes de numerosos países y de organismos regionales e internacionales se pronunciaron en el contra el cerco económico, que frena el desarrollo sostenible de la Mayor isla de las Antillas, y entorpece su comercio exterior y sus relaciones financieras internacionales.
Ya en el segmento de alto nivel del septuagésimo noveno periodo de sesiones de la Asamblea General, iniciado en septiembre, fueron muchos los lideres mundiales que en sus intervenciones rechazaron el asedio contra la población cubana, 80% de la cual ha vivido siempre bajo el bloqueo.
Las jornadas en la ONU estuvieron antecedidas por múltiples acciones en todo el orbe.
En 2024 no se detuvieron las caravanas de solidaridad con los cubanos, que tuvieron como escenarios ciudades de numerosos países, incluido Estados Unidos.
A lo largo de estos doce meses se celebraron encuentros de Solidaridad en España, China, Panamá, Colombia y Francia. Tuvo lugar igualmente en la ciudad estadounidense de Detroit la Conferencia Anual de la Red Nacional sobre Cuba, que reunió a representantes de decenas de organizaciones y movimientos sociales.
En Cuba, a su vez, se desarrolló la Jornada por la Paz, contra el Bloqueo y el Terrorismo. La iniciativa, promovida por el Instituto de Amistad con los Pueblos, fue apoyada por movimientos solidarios de otras naciones.
Destacan también otras campañas de respaldo al pueblo cubano, como el movimiento Manos Fuera de Cuba, desarrollada en julio pasado por la Federación Sindical Mundial, la cual agrupa a 105 millones de afiliados de 133 naciones.
A lo largo de 2024 el territorio nacional acogió, como es habitual, a amigos de los cubanos. En La Habana, la capital, se celebró en mayo el Encuentro Internacional de Solidaridad con Cuba y contra el imperialismo, con la participación de más de MIL cien delegados de 58 países, quienes coordinaron nuevas acciones en contra del cerco económico.
Asimismo estuvieron junto a los cubanos miembros de las Brigadas Ernesto Che Guevara, de Canadá; Venceremos, de Estados Unidos; Juan Rius Rivera, de Puerto Rico; y la José Martí, de Europa.
También se escucharon pronunciamientos contra la politica hostil estadounidense en la Octava cumbre de la CELAC, Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, efectuada en marzo en San Vicente y las Granadinas, en el Foro Interpartidista y asociados BRICS, que tuvo lugar en junio en la ciudad rusa de Vladivostock y en la Vigésimo novena Cumbre Iberoamericana, de noviembre en Cuenca, Ecuador.
Incontables han sido en 2024 las acciones de solidaridad con el pueblo cubano y constante el reclamo mundial para que se ponga fin al bloqueo, pues Cuba tiene derecho a vivir en paz.