Dotado con la más alta tecnología y pionero en Cuba en la introducción de las técnicas quirúrgicas más novedosas, el Centro de Microcirugía Ocular (CMO), del Instituto Cubano de Oftalmología Ramón Pando Ferrer, en La Habana, es referente en el país y, además, ha logrado una reconocida proyección internacional.

En sus 29 años de fundado por el líder de la Revolución cubana, Fidel Castro, ha atendido a unos 978 mil pacientes y ha realizado casi 276 mil cirugías, de ellas, más de 195 mil de catarata, la dolencia ocular más frecuente en todo el mundo, si se tiene en cuenta el acelerado envejecimiento poblacional.

Durante los últimos tres años allí se han efectuado más de 36 mil cirugías de catarata, con lo cual se alcanzó cifra récord y con la mayor cantidad el año precedente cuando se realizaron casi 13 mil, superior al 90 por ciento,  por la Técnica de Facoemulsificación.

Según precisó a la Agencia Cubana de Noticias  el doctor Reynaldo Ríos Caso, subdirector del “Pando Ferrer” y jefe del Grupo Nacional de Oftalmología, esa técnica no es dolorosa ni durante ni después de la operación, y se puede hacer con anestesia tópica (gotas) sin necesidad de inyecciones.

Comentó que a partir de 2010 en Cuba se ha producido un incremento notable en la prevención de la ceguera por las causas más frecuentes: catarata, glaucoma, retinopatía diabética, opacidades corneales, defectos refractivos y degeneración macular relativa a la edad, entre otras.

Todas esas dolencias son potenciadas por el envejecimiento poblacional -aclaró el experto-,  quien alertó que actualmente el 19,8 de la población en la mayor isla de Las Antillas sobrepasa las seis décadas.

En los últimos cuatro años se han incrementado significativamente las cirugías de catarata (primera causa de ceguera curable en el orbe, incluida la Isla), cuando el país superó la tasa ideal propuesta por la Organización Mundial de la Salud, de realizar tres mil cirugías por cada millón de habitantes (33 mil anualmente).

Ejemplificó el experto que en 2013 se hicieron más de 35 mil intervenciones quirúrgicas de ese tipo, y ya en 2016 superaron  las 38 mil, lo que constituye un récord histórico.

Abanderado en las investigaciones relacionadas con el cristalino y la cirugía de catarata,  el “Pando Ferrer”  ha formado cientos de especialistas cubanos y foráneos, lo cual ha contribuido a extender por todo el archipiélago nacional la moderna tecnología y crear otros centros en varias naciones.

En aras de devolver luz y esperanza a las personas con problemas oculares en la región, a partir de julio de 2004, con la puesta en marcha de la Misión Milagro por idea de Fidel, ese programa oftalmológico ha beneficiado a casi tres millones de pacientes de más de 30 países, refirió Ríos Caso.

De ese total de cirugías, 662 mil son de catarata, efectuadas fundamentalmente a pacientes de Centro, Sur América y el Caribe.  

Colaboradores de la nación caribeña hoy día laboran en centros oftalmológicos de 11 naciones, mediante ese programa de salud liderado por Cuba y Venezuela, el cual nació el 10 de julio de 2004 cuando fue intervenido quirúrgicamente el primer grupo de pacientes venezolanos en el “Pando Ferrer”, de referencia nacional en esa especialidad.

Para el Doctor en Ciencias Marcelino Río Torres, director de esa institución, es un gran orgullo ser fundador de la Misión Milagro y confesó a esta Agencia de Noticias que el 29 de abril del próximo año, cuando el CMO cumpla tres décadas, el mayor homenaje a Fidel será mostrar el logro que ha tenido este centro para el país y otros estados del planeta.

“Tenemos el honor que la otrora Operación Milagro comenzó en el Pando Ferrer”, manifestó Marcelino Río Torres, quien ha formado diversas generaciones de profesionales de esa especialidad que tiene el importante reto de enfrentar el envejecimiento.

Insertada en el Programa Nacional de Discapacidad y Salud Ocular, la oftalmología cubana continuará priorizando y perfeccionando el tratamiento quirúrgico de la catarata, por ser la primera causa de ceguera curable; así como también sus compromisos de solidaridad internacionalista en este campo.

(Tomado de la ACN)