Por: Guillermo Alvarado

La decisión de Estados Unidos y su brazo armado foráneo, la Organización del Tratado del Atlántico Norte, OTAN, de extender sus dominios por Europa del este, muy cerca de las fronteras con Rusia, causa preocupación en Moscú y otras partes del mundo donde se le considera como una de las principales amenazas para la paz.

Analistas y observadores señalan que el pretexto de Washington y sus aliados de aplicar medidas exclusivamente defensivas, esconde en realidad la intención de asegurarse la hegemonía militar sobre el planeta.

El director del Instituto de Estudios Diplomáticos, Políticos y de Seguridad de Moldova, Valeriu Ostalep, cuestionó la reciente instalación en Rumanía y Polonia de varias unidades del sistema antimisiles de la OTAN y rechazó que se trate de una operación para garantizar la paz.

A mediados de mayo entró en disposición combativa bajo la bandera de la alianza bélica un sistema anticoheteril estadounidense del tipo Aegis Ashore en la base de Deveselu en Rumanía, apenas a 600 kilómetros al oeste de Crimea, sede de la Flota rusa del mar Negro.

Veinticuatro horas después en la localidad polaca de Redzikowo, a unos 180 kilómetros del punto más occidental de Rusia, el enclave de Kaliningrado, se inició un emplazamiento similar.

Autoridades de los dos paìses alegaron que se trata de un acto puramente defensivo, pero Ostalep aseguró que ninguno de esos gobiernos tuvo que ver con la medida, que se decidió en otra parte.

Mientras, el presidente ruso, Vladimir Putin,indicó que los componentes del escudo antimisiles de la OTAN en Europa no son sistemas defensivos, sino parte del potencial nuclear estratégico del Pentágono.

Añadió el mandatario que el complejo ubicado en territorio rumano puede ser empleado como un arma contra Rusia solo con un cambio de programa informático.

El analista Joshua Shifrinson dio la razón a Moscú en sus inquietudes y afirmó que en realidad Estados Unidos incumplió sus promesas de que tras la caída del campo socialista europeo no extendería los dominios de la OTAN por ese continente.

Si bien nunca se firmaron acuerdos ni tratados en esa dirección, existen memorandos, actas de reuniones y declaraciones que así lo indican, afirmó Shifrinson en un artículo publicado en el diario Los Ángeles Times.

El periodista suizo Frédérick Koller, señaló que ya es tiempo de que la OTAN dialogue de manera abierta con Rusia y reconozca que sus instalaciones más recientes no son defensivas, sino que apuntan directamente al país norte europeo.

"La OTAN está desarrollando un escudo de defensa antimisiles. ¿Por qué no decir que está dirigido contra Rusia?", dijo el comunicador, y agregó que la actitud de la alianza atlántica provocará una escalada de las tensiones en todo el continente.

Se trata de señales alarmantes y demuestran que a pesar del Premio Nobel de la Paz entregado prematuramente al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, en Washington prevalecen la lógica militar y los esfuerzos por obtener el control del mundo bajo la fuerza de las armas y la amenaza de su uso.