Por: Marisela Presa(*)
La propuesta del Ingeniero mecánico Mario Luis Soberon Martínez, alcanzó la categoría de Relevante en el Fórum provincial de Ciencia e Innovación Tecnológica, al cumplir varias condiciones, las principales sustituir importaciones y romper el bloqueo para seguir desarrollando a nuestro país.
Hace solo siete años que labora en el Taller de la Estación de Servicios Técnicos de Jiguaní, de la Empresa provincial de Granos Fernando Echenique, donde se desempeña como especialista principal, integrado desde el primer día al movimiento de los innovadores y racionalizadores que tanto han aportado al país.
El reto es evidente, y la respuesta de ese colectivo no se hace esperar, el conocimiento lo tienen y también la disposición.
Contó el ingeniero Mario Luis, que en su taller confeccionan piezas de repuesto para la industria arrocera, y que por las necesidades del país crearon una torre de secado para la provincia de Villa Clara, sustituyendo así importaciones.
También fabricaron otras para el secadero de arroz Emilio Lastre de Yara y para la empresa agroindustrias de granos, José Manuel Capote, ambos en esta provincia de Granma.
Contó que ya tienen contratos para fabricar piezas para el territorio de Mayarí en Holguín y para Las Tunas, mientras que está en proceso de puesta en marcha una planta para producir harina de arroz, un producto comprobado en Granma con gran efectividad , en la producción de embutidos, en la industria Alimenticia, que sustituye importaciones.
Las torres de secado valoradas en cinco o seis mil dólares es un ahorro significativo a nuestra economía ,sin contar con las dificultades existentes país para trasladar esos recursos desde el exterior, destacó el joven ingeniero, con ese orgullo natural que expresa la voluntad de hacer como país .
Y narra cómo hoy el costo de fabricación de estas torres de secado resultó de unos ocho mil pesos en moneda nacional, realmente un ahorro consecuente de divisas. Trascendente igual el ahorran en transportación y en el montaje, que realizan ellos mismo.
Este es un taller integral, asegura este joven ingeniero, da servicios al resto de las empresas enclavadas en el municipio granmense de Jiguaní y ahora participan en un proyecto, junto a la Empresa de Genética y Cría Manuel Fajardo de ese territorio, que producen de embutidos, maquinarias a la cuales aportan parte y piezas.
Apenas unos 30 años de edad, nacido con la Revolución, educado en nuestras universidades, el ingeniero Mario Luis Soberon Martínez, natural de esta provincia de Granma es muestra del compromiso social que les anima en ese inquebrantable concepto de pensar como país.
(*)Corresponsal de Radio Habana Cuba, Granma.
