La Habana, 22 sep (RHC) Especialistas del Parque Nacional Guanahacabibes, en la provincia Pinar del Río, impulsan un proyecto denominado Costa limpia, nacido a raíz de la situación mundial de los deshechos que flotan sobre los mares y el impacto que tiene en la región occidental de Cuba.

Lázaro Márquez, coordinador del proyecto, explicó que además del saneamiento de grandes extensiones de costa se han incluido estudios científicos, a fin de determinar cuánta basura oceánica arriba a esa sensible región del occidente cubano y sus posibles efectos sobre el medioambiente.

Costa Limpia surgió hace dos años y con el propósito de impedir que la región se convierta en un enorme tiradero, el proyecto ha logrado movilizar a los pobladores, a estudiantes universitarios de La Habana y Pinar del Río que realizan ahí sus prácticas profesionales o ayudan a la conservación de las tortugas marinas, e incluso, a los turistas.

A partir de ese esfuerzo conjunto, en el que intervienen el Parque Nacional, la empresa Agroforestal Guanahacabibes y otras instituciones se han limpiado amplios sectores de la zona costera y recogido un volumen considerable de plásticos, que se emplean en reciclaje como materia prima y en la elaboración de objetos utilitarios.

La experiencia ha tenido un impacto significativo en el plano ambiental, pues los desechos afectan procesos naturales como la anidación de tortugas marinas y el desarrollo de la vegetación de costa arenosa, aseguró Márquez.

Por otra parte, afirmó que, desde el punto de vista científico ha permitido ampliar el conocimiento y avalar la metodología diseñada, para su potencial aplicación en otras zonas de Cuba afectadas por la acumulación de basura de origen oceánico.

En el caso de Guanahacabibes, el especialista subrayó que, a partir de los cálculos realizados, estiman el arribo de entre 15 y 20 toneladas anuales de basura (principalmente objetos plásticos), debido a su posición geográfica y al complejo sistema de corrientes marinas que la bordea.

Advirtió que existe un llamado de las Naciones Unidas a que los países que sufren esta situación intenten controlarla de alguna manera o mitigar los efectos que trae a la naturaleza y a la biodiversidad marina. (Fuente: ACN).