Moscú, 26 sep (RHC) La actuación de la primera bailarina cubana Viengsay Valdés en la pieza Don Quijote pareció agotar  los aplausos que el público pudiera dar en Moscú, tras una actuación memorable en el Festival Internacional de Ballet del Kremlin.

Junto a la compañía del Ballet del Palacio Estatal del Kremlin, Valdés impregnó la cubanía a una Kitry que cautivó a más de seis mil espectadores en ese recinto dentro de las murallas del Kremlin, el cual impidió por largo rato su abandono del escenario, reseña Prensa Latina.

Gritos de Viva Cuba, los queremos o lindos en perfecto español se oyeron durante la extensa ovación que pasó más allá de todos los protocolos habituales para aplaudir a Valdés y Danny Hernández para convertirse en un improvisado homenaje al ballet cubano.

Apurada, en medio de todos los atuendos de la actuación, Valdés declaró a Prensa Latina que la versión de Kitry en el Don Quijote del Ballet del Kremlin es totalmente diferente a todo lo que ha hecho en ese papel hasta ahora.   

Ya interpreté la del Ballet de Mariinski, la del Washington Ballet, de An Marie Holmes, donde hice el debut de esa versión, también la del Ballet de Donetsk, la de Oporto, de Portugal, y la cubana, entre otras, comentó Valdés, ataviada aún con el atuendo de Kitry.

Ahora es la segunda ocasión en que yo bailó en el Kremlin. La primera vez fue en el 2005 por el aniversario 80 de Maya Plizetskaya, recordó.

En aquella ocasión se hizo una función de Don Quijote y era conjunta con todas las estrellas invitadas del mundo. Yo interpretaba solo un fragmento del primer acto, pero esta vez tuve la oportunidad de hacerlo con una coreografía del Ballet del Kremlin, apuntó.

A pesar de haber hecho cosas muy importantes, esta era una de las funciones más esperadas para mí en este año, pues me preparé por mucho tiempo psicológicamente para ella, comentó.

Además, logramos hacer la versión cubana del Adagio del pas de deux, con lo cual pude emplearme a fondo en los balances y otras cosas que puedo hacer, para así traer un pedacito de Cuba a esta producción como una forma de destacar nuestra compañía, subrayó entusiasmada.

Tengo una agenda muy cargada, pues al volver a Cuba, en pocos días salgo para un festival en Cali, y luego estaré en el Festival Internacional de La Habana. Es mucho trabajo, confesó la primera bailarina cubana, invitada al festival junto a Danny Hernández.