La Habana, 6 oct (RHC) El Museo Nacional de Bellas Artes (MNBA) de Cuba acoge, desde hoy y hasta enero de 2018, una exposición antológica del artista norteamericano Boris Lurie (1924-2008), uno de los fundadores del NoArt.

La muestra titulada Boris Lurie en La Habana es la primera de este creador en América Latina y la organiza la fundación que lleva el nombre del artista con la esperanza de sentar un precedente para montar otras exposiciones dentro del mismo continente, indica Prensa Latina.

Según el MNBA, la serie exhibirá 95 obras representativas de los diferentes momentos y tendencias creativas de Lurie.

El artífice estadounidense ha sido considerado por los críticos como una encarnación del vanguardismo por sus posturas estéticas y políticas, abiertamente contestarías contra los movimientos artísticos que predominaron entre las décadas de 1950 y 1970.

Para él, estaban sometidos al mercado del arte y carecían de compromiso político y social.

Junto a otros creadores que rechazaban el arte Pop, integró Lurie en 1959 un movimiento denominado NoArt, el cual promovía un arte no comercial y abordaba temas como el sexismo, el racismo, el imperialismo y el armamentismo nuclear.

De estas posiciones emergió una obra muy controvertida que estéticamente se manifiesta en los códigos del Neo Expresionismo, y técnicamente mediante el collage, entre otros medios.

Los artistas del NoArt utilizaron la imaginería del holocausto y elementos objetuales de la cultura popular, como anuncios, fotos eróticas o de personajes célebres de la política.

Lurie estuvo en contra de los críticos de arte y de la política de coleccionismo de los grandes museos, por ello su obra, en gran parte, fue ignorada y permanece prácticamente en el desconocimiento hasta la actualidad.

Por su parte, la Boris Lurie Art Fundation de Nueva York intenta valorizar la vida y obra del artista, además de preservar y promover las creaciones surgidas del movimiento NoArt.

Con esa finalidad, organiza exposiciones dentro y fuera de Estados Unidos, como esta que permanecerá cuatro meses en la Sala Temporal del Edificio de Arte Universal del MNBA de Cuba, país por el cual Lurie sintió una especial admiración.