La Habana, 5 julio (RHC)- El hotel Iberostar Playa Pilar, de Cayo Guillermo, en el litoral norte de la provincia cubana, Ciego de Avila, ha tenido muy buena aceptación, principalmente, de turistas canadienses y europeos.
Alexeis Torres, especialista en marketing del grupo, afirmó que esa es la más nueva instalación hotelera de la cadena ibérica en Cuba y la única que dispone de SPA y parque acuático, un sello distintivo de Iberostar Hotels & Resorts.
Con categoría Premium Gold Cinco Estrellas y servicio de lujos para toda la familia, el hotel ubicado en el destino turístico Jardines del Rey, se encuentra a solo 10 minutos de Playa Pilar, uno de los más bellos balnearios de El Caribe.
También en Cayo Guillermo está enclavado el hotel Iberostar Daiquirí, con una nueva imagen, habitaciones remodeladas y mobiliario con colores tropicales, iniciativa de de la compañía para ofrecer en cada temporada un producto más acogedor, resaltó Torres.
Exhibe un alto por ciento de repitencia y está ubicado frente a la segunda barrera coralina más importante del mundo, por lo que el turista puede disfrutar de deportes náuticos, en especial, del buceo por las bellezas naturales que aguardan los fondos marinos.
Agregó que otra instalación acogedora es el Iberostar Mojito, en Cayo Coco, situado en primera línea de una hermosa playa de finísima arena, a la cual se llega mediante pasarelas de madera para no afectar la duna y la vegetación autóctona de la zona.
Posee gran belleza arquitectónica, con edificios de dos y tres niveles y habitaciones sobre pilotes en una laguna natural que se comunica con el mar mediante canales.
Destacó que las tres fortalezas que distinguen a la compañía española son: la Gastronomía, La animación y la variedad y calidad de los servicios.
Iberostar Hotels & Resorts tiene en Jardines del Rey una peculiaridad que sus tres hoteles resaltan, aspectos de la vida del escritor norteamericano Ernest Hemingway.
Pilar, se llamaba el yate en que el autor de Islas en el Golfo, surcó los mares que rodean la Isla de Cuba durante la II Guerra Mundial; daiquirí, fue su trago favorito que lo tomaba con frecuencia en el bar- restaurante El Floridita, en La Habana, y el mojito, fue otro cóctel que en ocasiones degustaba en diversos lugares de la Isla.
(PL)