Tel Aviv, 12 oct (RHC) Israel abandonará la UNESCO para imitar similar paso dado por Estados Unidos. El primer ministro israelí, Benjamín Netanyáhu, instruyó al Ministerio de Relaciones Exteriores para que prepare la retirada de Tel Aviv de esa organización.

Las autoridades del país hebreo han manifestado recientemente su desacuerdo con la UNESCO, luego que ese organismo internacional criticara la política de asentamientos en los territorios palestinos ocupados.

Estados Unidos notificó la decisión de retirarse de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura.

La comunicación hecha por el Departamento de Estado expresa el propósito de establecer una misión permanente de observación, fue dirigida a la directora general de la entidad, Irina Bokova.
Washington justificó su decisión con preocupaciones de los atrasos de los pagos, la necesidad de una reforma fundamental, y la tendencia, contra Israel en la organización, según su criterio.

La representante permanente de Estados Unidos ante la ONU, Nikki Haley, justificó la decisión de su país de abandonar la Unesco con una supuesta politización de ese órgano, mientras Israel celebró aquí la postura de Washington.

'El propósito de la Unesco es bueno, pero su politización se ha convertido en una vergüenza crónica', dijo en una nota de prensa la diplomática, quien acusó a la

Organización de las Naciones unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura de atacar a Israel y de mantener a Siria en sus mecanismos.

Haley recordó en particular la designación en julio pasado por la Unesco de la Ciudad Vieja de Hebrón y de la Tumba de los Patriarcas, en el territorio ocupado de Cisjordania, patrimonio palestino de la humanidad.

Entonces advertimos que esa decisión afectaría nuestro nivel de compromiso con la organización, precisó.

La embajadora norteamericana reiteró la amenaza de que la Casa Blanca mantendrá la evaluación de todas las agencias del sistema de la ONU con el mismo lente, en una declaración que no deja dudas de la proyección unilateral de Washington en el principal foro multilateral del planeta, integrado por 193 países.

En sus comentarios, Haley recordó que en 1984, el entonces presidente estadounidense, Ronald Reagan, había decidido también la retirada de la Unesco.

'Como afirmamos aquella vez, los contribuyentes norteamericanos no tienen por qué pagar por políticas que son hostiles a nuestros valores y se burlan de la justicia y del sentido común', esgrimió.

Por su parte, el representante permanente israelí, Danny Danon, celebró la postura de la actual administración en Washington y acusó a la Unesco de convertirse en 'un campo de batalla contra Israel'.

Según Danon, la decisión del presidente Donald Trump constituye un punto de viraje en una organización que 'debe pagar el precio de discriminar a su país'.

El secretario general de la ONU, António Guterres, lamentó hoy a través de sus voceros el anuncio de la Casa Blanca.