La Paz, 9 dic (RHC) El presidente de Bolivia, Evo Morales, saludó este sábado el Día Internacional Contra la Corrupción en su cuenta oficial de Twitter, en cuyo mensaje afirmó que el gobierno nunca encubrirá a acusado alguno por tal flagelo.

En dicha red social, el jefe de Estado de la nación andino amazónica señaló que en el país se ha llevado adelante una política de lucha contra la corrupción, como parte fundamental de la agenda gubernamental.

Agregó además en su tuit, una presentación de video con mensajes relacionados al daño provocado por quienes dirigieron el país altiplánico en épocas precedentes antes de su gestión como presidente.

De tal manera, Morales recordó que entonces existió una corrupción sin límites, que saqueó al pueblo más pobre de la región y hundió en la miseria a Bolivia.

Precisó, que en tan solo 20 años estos actores provocaron en la nación un daño al Estado de más de 10 mil millones de dólares, además de vender las empresas públicas al 20 por ciento de su valor.

Durante 11 años como presidente, Morales ha recuperado las empresas estratégicas y nacionalizado los recursos naturales, imprescindibles en pos devolverles la dignidad y soberanía al pueblo boliviano, como parte de la Agenda Patriótica-2025.

La Organización de Naciones Unidas, en su portal digital, refiere que cada año se paga un billón de dólares en sobornos y se roban unos 2.6 billones de dólares mediante la corrupción, suma equivalente al cinco por ciento del Producto Interno Bruto mundial.

Sostiene que, “según el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, se calcula que en los países en desarrollo se pierde, debido a la corrupción, una cantidad de dinero diez veces mayor que la dedicada a la asistencia oficial para el desarrollo”.

La organización mundial indica que este delito grave frena el desarrollo económico y social en todas las sociedades y que ningún país, región o comunidad es inmune.

Asimismo, menciona el impacto que este flagelo tiene sobre la educación, la sanidad, la justicia, la democracia, la prosperidad y el desarrollo.

(Fuente/PL)