Esta será la primera visita de Lula a la división territorial desde el inicio de su tercer mandato el 1 de enero. (Foto:PL)
Brasilia, 1 sep (RHC) El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, visitará este viernes el estado Rio Grande do Norte, donde presentará el programa Agua para Todos que aglutinará inversiones para el sector hídrico.
Tal plan incluye además almacenamiento, como represas y embalses, distribución de agua, recuperación de ríos y manantiales, además de recursos en saneamiento.
Creada por el Gobierno federal a través de un decreto el 26 de julio de 2011, la iniciativa reúne medidas preventivas y correctivas contra la sequía en las regiones en las cuales la precipitación pluviométrica resulta escasa, sobre todo en las zonas rurales.
Esta será la primera visita de Lula a la división territorial desde el inicio de su tercer mandato el 1 de enero.
La última vez que el fundador del Partido de los Trabajadores estuvo en Rio Grande do Norte fue el 16 de junio de 2022, en la primera edición de la Feria Nordeste de Agricultura Familiar y Economía Solidaria.
En la ocasión, participó asimismo en un acto político durante la precampaña electoral.
Según el Gobierno, el acceso sostenible al agua de calidad y en cantidad suficiente para el consumo de la población es el principal objetivo de este eje del llamado Nuevo Programa de Aceleración del Crecimiento.
Además de promover la aproximación al agua, las inversiones fortalecerán a las comunidades frente a los desafíos hídricos y climáticos, contribuyendo para el bienestar humano y el desarrollo socioeconómico.
En este eje, de acuerdo con la fuente, también se priorizarán emprendimientos que tengan capacidad de preservar los ecosistemas y proporcionar adaptación a eventos climáticos extremos, todo ello por medio de un fuerte diálogo federativo.
Las inversiones son realizadas por estados, municipios, sector privado y organizaciones sin fines de lucro.
Según estudios de las Naciones Unidas, mil millones de personas en el mundo no disponen de un suministro de agua suficiente. En Brasil, son casi 35 millones que no tienen acceso a ese servicio básico.
Especialistas aseguran que las razones para ello son variadas, como el crecimiento poblacional desenfrenado, la contaminación de los manantiales de agua, la sobreexplotación de las capas freáticas y la degradación de los bosques.
Hay, sin embargo, formas de disminuir el impacto de esas acciones en la naturaleza y garantizar agua de calidad para toda la población.
La democratización del acceso al bien pasa por iniciativas que promueven el consumo consciente del agua, mejoras en la recolección de basura y alcantarillado, entre otros puntos, refieren los entendidos. (Fuente:PL)
