Según los equipos de rescate del ente encargado de la seguridad en aguas españolas, los socorridos en esa área -unión natural entre el mar Mediterráneo y el océano Atlántico- fueron trasladados a varios puertos de la sureña región de Andalucía.

Decenas de miles de migrantes irregulares, la mayoría procedentes de África, tratan cada año de llegar a las costas europeas en frágiles embarcaciones o a través de las fronteras de Ceuta y Melilla, enclaves españoles en el norte de Marruecos.

Muchos se decantan por alargar su itinerario terrestre hasta territorio marroquí y cruzar desde allí a España, en vez de atravesar la peligrosa Libia para embarcarse hacia Italia en la conocida como ruta del Mediterráneo central.

La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) informó el pasado martes que esta nación ibérica superó ya a Italia en el número de inmigrantes que llegan al llamado viejo continente tras atravesar la peligrosa vía marítima.

Desde el 1 de enero hasta el 15 de julio, 18 mil 16 indocumentados tomaron la ruta occidental del Mediterráneo (que une Marruecos o Argelia con España) para alcanzar las costas europeas, mientras que 17 mil 827 lo hicieron por la parte central (entre Libia e Italia).

Sólo en los últimos 45 días, nueve mil 866 personas alcanzaron el litoral de este país, lo que significa una media de 220 por día, de acuerdo con la OIM.

Esta organización de Naciones Unidas estima que la cifra de ahogados en 2018 durante la travesía asciende a mil 500.

'España se ha convertido en la ruta más activa para los migrantes africanos y para las personas que utilizan África como trampolín hacia Europa', declaró Joel Millman, portavoz de la OIM, en una rueda de prensa en Ginebra.