C. Avila, Cuba, 27 feb (RHC) Los vinos artesanales cubanos han ganado en calidad, variedad y en presentación, manifestó Noel Morales, presidente de la Coordinadora Nacional de Vinicultores en Cuba.
La provincia de Ciego de Avila, 430 kilómetros al este de La Habana, acogió durante tres días a unos 120 fabricantes del licor en Cuba, al celebrarse el XXVI Festival de vinicultores artesanos.
En el certamen se evaluaron mediante la cata unas 90 muestras de la bebida en ocho categorías: blanco, rosado, espumoso, tinto, seco, semiseco, dulce y semidulce, de 12 provincias del país.
El gran premio lo obtuvo Orelvis Rodríguez, de Cienfuegos, quien presentó un vino semiseco de cereza, mientras, por provincias el primer lugar fue para Sancti Spíritus, el segundo compartido Ciego de Avila y Holguín y el tercero Villa Clara.
Según Morales hoy a 26 años de estos festivales se impone la calidad y diversidad de los vinos criollos y el interés por fabricarlos con un sello único, utilizando variedades de frutas tropicales.
En Cuba existen 714 vinicultores privados agrupados en 32 clubes, cuyo interés radica en incrementar la cultura vinícola y los buenos hábitos del consumo sano de esa bebida, en localidades y barrios, apuntó.
